Victoria Irouleguy, que participa en el reality Gran Hermano en Argentina, hizo su entrada a Gran Hermano Israel donde estará dos semanas en un plan de intercambio entre ambos programas televisivos, a menos que sea eliminada el próximo miércoles en su país.
En un lujoso auto embanderado con los colores celeste y blanco de la bandera argentina, Vicky arribó a la casa ubicada en Jerusalén y luego de pasar por una alfombra roja y saludar al público, ingresó y fue recibida con una ovación por el numeroso público israelí allí reunido y por sus nuevos compañeros, con quienes convivirá 14 días.
«¿Cómo andan? ¡Qué lindos que son!», fue lo primero que dijo Vicky al ver al grupo. «¿Alguien sabe hablar español?», preguntó luego. «Sí, un poquito», le respondió Avivit Bar Zohar, justamente quien viajará en los próximos días a Argentina para convivir con los «hermanitos» locales.
Vicky pasó un pequeño papelón en la casa de Gran Hermano Israel. Fue cuando uno de sus nuevos compañeros, curioso, le preguntó cómo era el himno argentino.
La bella participante se paró delante de ellos, puso su mano derecha sobre el corazón y comenzó a cantar... y a dudar.
«¡Oíd, mortales!, el griiito sagraaado. ¡Libertad!, ¡libertad!, ¡libertaaad!», arrancó con énfasis la nuestra representante. Pero cuando debía seguir con «Oíd el ruido de rotas cadenas, ved en trono a la noble igualdad», optó por salteárselo y se fue directamente hacia «Yaaa su trooono dignísimo abrieeeeron...». Aunque, a juzgar por el audio, lejos estuvo de decir la palabra «dignísimo».
Luego dudó sobre cómo seguía la letra, haciendo silencios mientras sus compañeros la miraban atentamente, sin entender mucho.
Victoria optó por sentarse y escuchar el Hatikvá, el himno nacional de Israel, pero luego de oírlo, no puedo evitar comenzar a reír al ver que no se acordaba el himno argentino. «¡Nooooo! En Argentina, ¡puuum!», les dijo a los hermanitos, imitando el sonido de un revólver sobre su cabeza, dando a entender que en Argentina la «iban a matar» por olvidarse la letra.
"No more, please!" (no más, por favor), les pidió. Pero no pudo con su genio, y segundos después insistió en recordarla, volvió a entonarla... y volvió a fallar.
«I don't remember! Sorry» (no me acuerdo, perdón), dijo en inglés. «¡Perdón, Argentina!», gritó luego ante la mirada asombrada de los hermanitos israelíes.