El rey Goodwill Zwelithini, líder de la nación zulú en Sudáfrica, celebró el Día de la Independencia de Israel, junto con su esposa, la reina Thandi, en una ceremonia realizada en la embajada del Estado hebreo en Pretoria.
El monarca, de 64 años, es el líder ceremonial de la población zulu de su país, el grupo étnico negro más grande de Sudáfrica.
Junto con el rey, otros importantes dignatarios asistieron al acto: el Reverendo Monseñor Dr. B.E. Lekganyane, líder de la Iglesia cristiano-sionista, el Reverendo Kenneth Meshoe, diputado y presidente del Partido Demócrata Cristiano Africano, y el embajador C.T. Rubushe, director jefe de Oriente Medio en el Departamento de Relaciones Internacionales y Cooperación de Sudáfrica.
El evento contó también con la presencia de 400 invitados, entre los sionistas cristianos y los miembros de la comunidad judía. Además de un almuerzo con menú israelí, bandas sudafricanas locales entretuvieron a los invitados. El himno nacional israelí fue interpretado por el coro juvenil Zimriá.
En su discurso, el embajador de Israel en Sudáfrica, Dov Segev-Steinberg, expresó su agradecimiento por un evento tan excepcional con la participación de personalidades de tan alto calibre.
Segev-Steinberg habló de los «progresos increíbles» que Israel desarrolló en sectores como tecnología, medicina, ciencia, educación o agricultura y la necesidad y voluntad de compartir sus conocimientos y habilidades con otros países del mundo.
En cuanto al proceso de paz con los palestinos, el embajador expresó el deseo de construir puentes hacia un diálogo significativo con el fin de encontrar un resultado basado en el principio de una solución de dos Estados.
Con su mandato que termina a finales de este año, Segev-Steinberg concluyó su discurso con una nota personal que resumió sus últimos cinco años en Sudáfrica. «Esta experiencia siempre tendrá un lugar especial en mi corazón», afirmó.
Por su parte, el rey zulú, elogió la capacidad del pueblo judío de aceptar siempre los desafíos y se refirió a Israel como un país lleno de paradojas, tragedias y triunfos. También expresó el deseo de profundizar la cooperación con Israel en el ámbito de la agricultura y promover los intercambios de jóvenes entre ambos Estados.
El embajador C.T. Rubushe transmitió un mensaje del Gobierno de su país en el que reflejó las importantes contribuciones que salieron de la comunidad judía de sudafricana. «Muchos judíos contribuyeron significativamente al desarrollo de Sudáfrica y muchos también tomaron parte en la lucha contra el apartheid y la liberación», afirmó.
En cuanto a las relaciones bilaterales, Rubushe elogió «las contribuciones increíbles que Israel hizo a Sudáfrica».
«Los valiosos proyectos israelíes que se llevan a cabo en mi país son muy necesarios y complementarios a los objetivos de nuestro Programa Nacional de Desarrollo», añadió.
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