Los ministros israelíes de Comunicaciones y Defensa Civil, Gilad Erdán, y Finanzas, Yair Lapid anunciaron, el cierre el próximo año del servicio público de televisión y radio. En su lugar se constituirá un organismo que aspira ser más barato e independiente y que podrá competir con los medios privados.
Erdán y Lapid presentaron las conclusiones de una comisión que estudió cómo medirse con el déficit económico, técnico, político y de audiencia de la red.
El camino a dicha remodelación requiere la aprobación del Parlamento y se prevé el despido de la mitad de los casi 2.000 empleados. Teniendo en cuenta la fuerza sindical de ese órganismo, no será tan sencillo.
«Hoy iniciamos un proceso vital para salvar el servicio público. La única opción que tenemos es cerrar el actual ente de radiodifusión y crear uno nuevo de calidad basado en criterios estrictamente profesionales», afirmó Erdán.
«El ente fue víctima de una pésima gestión, nula programación, fuga de estrellas y recursos anticuados. Ojalá este plan funcione porque necesitamos una fuerte cadena pública ante la cantidad de reality shows que emiten las privadas», explicó Moti Kirshembaun, ex director general del servicio público de radio y televisión y actual animador de un popular programa de noticias en el Canal 10.
Tras la reconstrucción, se mantendrán las ocho emisoras de la radio pública mientras la televisión dispondrá de un canal en hebreo, otro en árabe y uno infantil.
Para los ciudadanos, la noticia se refirió también a otra decisión. «Dentro de un año, se anulará la cuota de televisión que la mayoría de los habitantes la ve como un pago innecesario, injustificado y que no reporta nada a cambio», agregó Erdán, que cuenta con el apoyo del primer ministro hebreo, Binyamin Netanyahu.
«Los israelíes son patriotas y están dispuestos a pagar y servir a su país pero no a pagar cada año por una televisión obsoleta e irrelevante. No permitiremos que sigan financiando los errores de una organización fracasada», añadió.
Ram Landes, director de la comisión creada para reformar el servicio público, aseguró no tener dudas del éxito de la medida ya que «es la primera vez que los dos ministros responsables y el jefe de Gobierno apoyan el proyecto.
«El nuevo organismo público estará desconectado de la política. Los políticos no tienen nada que hacer allí. Debe haber una muralla entre el servicio público y el poder para que éste pueda ser criticado sin temor alguno», afirmó Lapid, quien debe a la televisión su éxito en la política.
Como titular de Finanzas, Lapid adelantó que el presupuesto se reducirá en un tercio y envíó un mensaje de calma a los empleados afectados por la incertidumbre.
«Dedicaron muchos años al servicio público y pactaremos acuerdos de rescisión que garanticen sus derechos. Los mejores podrán integrarse al nuevo organismo», aseveró.
«Necesitamos arreglar muchas cosas para ser un canal fuerte y atractivo pero este anuncio nos pone tristes y nerviosos ya que no sabemos qué pasará con nosotros en un año», reconoció la presentadora televisiva de deportes, Miri Eliakim.
Sin cuota fija, los recursos vendrán de la publicidad y el Estado.
«Es la comisión más seria que recuerdo pero si el dinero viene del Gobierno, dudo que consiga ser independiente», alertó el veterano periodista Dan Shilón.
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