La historia de Mor Mamán es la de la superación y la victoria con esfuerzo. Nombrada Miss Israel 2014, esta bella mujer reconoció que de niña era obesa.

La joven, que pronto espera alistarse en la Fuerza Aérea israelí, dijo al inscribirse en el certamen, que «la a participación en el concurso de Miss Israel es un sueño hecho realidad para mí».
 
«Hace cuatro años mi vida cambió. Mi madre se cayó y perdió la memoria como consecuencia de la caída. Llegué al hospital y ella no sabía quién era yo», explicó.

«Estaba enojada con todo el mundo, comencé descuidarme a mí misma. Luego mi padre tuvo un ataque al corazón. Crecí como una niña con sobrepeso», agregó.

Muy pronto comprendió que no tenía otra opción que levantarse.

«Tras el exceso de peso, comencé a desarrollar problemas de salud. A los 13 años, mientras mis padres estuvieron en Marruecos, durante dos meses, decidí que quería ser como todos las demás. Nadie me podía parar. Comí principalmente ensaladas, hice mucha actividad física y perdí 30 kilos como consecuencia de ello. No volví al sobrepeso desde entonces. Fueron días que me enseñaron a comer bien y a hacer mucho ejercicio», destacó.

«Cuando me pusieron la corona, sólo quería quitármela y colocártela a ti», declaró Mamán en una entrevista que el Canal 2 israelí le hizo junto a su madre.

Antes de su éxito, esta estudiante de Diseño Gráfico ya había creado un grupo de Facebook para ayudar a aquellas chicas que quisieran perder peso, con el fin de alejarlas del temible fantasma de la anorexia.

«Cuando los miembros del grupo tienen un momento difícil, ahora soy yo misma quien les aconseja que deben seguir su sueño y no darse por vencidos».

«Si yo lo conseguí, cualquiera puede hacerlo», les digo.

Ahora, el reto es Miss Universo en Brasil, donde Mor y las tres finalistas del certamen representarán a Israel.

Mamán aseguró que no iró sólo para pasear.

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