Gracias al congelamiento de sus óvulos, Keren fue madre después de su muerte. Antes de su fallecimiento debido a un cáncer, su esposo, Nissim, le prometió que tendrían hijos de los embriones que congelaron.
Luego de una prolongada lucha con el Ministerio de Salud Nissim tuvo que recurrir al alquiler de vientre en el exterior. Hace una semana, dos años después de su muerte, Keren tuvo un hijo.
Es el primer bebe israeli que nace de un embrión congelado de una mujer muerta a través del alquiler de vientres en el exterior.
La migraña terminó siendo un tumor cerebral
Nissim (42) conoció a Keren hace catorce años. Cuatro meses después se casaron. "Teníamos muchos sueños, casa, familia y por sobre todo hijos" cuenta Nissim. Pronto descubrieron que Keren no podia quedar embarazada y comenzaron un tratamiento de fertilización, a mediados del 2002 su mundo se derrumbó. "Keren se quejaba siempre de dolores de cabeza, y todos le decían siempre que tenia migraña hasta que un examen de medicina realizado en forma privada descubrieron que tenia un tumor"