Dos mujeres, de dos ámbitos comunitarios diferentes, en la misma ciudad, compartieron sus visiones acerca del rol de la mujer y sus desafíos.
Paulina, entrevistando. Mónica respondiendo.
A continuación presentamos el diálogo mantenido que hemos decidido dejarlo prácticamente en su formato textual dada la riqueza del encuentro.
Paulina Sorgen
Doctora en Psicología Clínica, psicoanalista. Fue docente de la Cátedra de Salud Mental de la Facultad de Medicina de UBA y miembro del equipo asistencial del Hospital de Clìnicas de la ciudad de Buenos Aires.
Docente de Torá y Mishná. Autora del libro "La interpretaciòn: Psicoanàlisis y Talmud. Un abordaje acerca de las semejanzas del método del descifrado y el Midrash" (2009 editor: Letra Viva, Buenos Aires).
Mónica Cullucar
Socióloga egresada de la Universidad de Buenos Aires.
Desde 1994 se desempeña como Directora de Proyectos Especiales del American Jewish Joint Distribution Committee, con sede en Argentina. Altamente involucrada en el quehacer comunitartio y en lo relativo a la participación de la mujer en los espacios institucionales judíos.
Paulina: ¿Por qué crees que Ethel propuso que nosotras nos encontremos?
Mónica: Ethel tiene un desarrollo importante e interesante en temas que tienen que ver con la mujer y el judaísmo. Entiendo que Ethel identificó que juntas podríamos tener un diálogo interesante, enriquecedor. Que desde aquí podíamos contribuir, hacer algún aporte, tener algunas ideas respecto de nuestra mirada desde este lugar del mundo, desde esta vida en comunidad respecto de la mujer y el judaísmo, la participación de las mujeres, el lugar de las mujeres en esta comunidad. Y que eso podía ser motivación para nuestro encuentro y también para Ethel en un diálogo tal vez mas a la distancia, al que invitamos a que participe también porque sus aportes son valiosos para nosotras también.
Paulina: Vos habías propuesto que lo hagamos por Skype, pero ella quiso que primero nos juntemos.
Mónica: Si porque Skype es un recurso que yo uso bastante para comunicarme con compañeras latinoamericanas o europeas y que facilita el diálogo porque estás viendo lo gestual, estas complementando la palabra con una imagen y estas promoviendo en tiempo real un encuentro.
Paulina: La mujer y el judaísmo, así ella llama su página, o el judaísmo y la mujer. ¿Cómo lo entendés vos, esto de la mujer y el judaísmo, hay lugar para ello?
Mónica: La mujer tiene lugar en el judaísmo desde que el judaísmo es, o sea desde el inicio de los tiempos. Entiendo que el foco esta puesto en este caso no en rastrear la historia, sino en ver como esa relación permanente, fuerte, intensa entre mujer y judaísmo tiene hoy un modo de expresarse en la vida judía contemporánea en distintos lugares del mundo.
Paulina: ¿Podríamos hablar del hombre y el judaísmo, se te ocurriría que hablemos alguna vez del hombre y el judaísmo?
Mónica: La verdad es que se me ocurriría pero como mi punto de vista tiene que ver con integrar, con construir puentes, con buscar paridades, con establecer vínculos que nos permitan una construcción conjunta. Prefiero no hablar por separado, en tal caso del hombre y la mujer, aunque tal vez hayan diferencias culturales que hacen más a las comunidades donde vivimos que a la historia del judaísmo, pero que vale la pena señalar porque hablamos de comunidades latinoamericanas y argentinas donde las mujeres tenemos poca historia de participación, bastante reciente. Justamente hoy, recordando el aniversario de la muerte de Eva Perón[1] que fue quien propició en Argentina la participación de las mujeres como electoras, ya que hasta ese momento las mujeres éramos participes de la vida política Argentina pero no teníamos decisión cívica.
Paulina: ¿Cuándo murió Eva Perón?
Mónica: Eva Perón murió hace exactamente 59 años y tenía 33 o 34 cuando falleció, así que...
Paulina: Te lo pregunto especialmente para que lo cuentes porque casi parece que esto fue de 1810[2]...
Mónica: No claro, esta es una historia, Eva Perón falleció en el año 1952, que además fue el año en el que yo nací. Por lo tanto en los años 40, 45, 50, en la Argentina, en un mundo convulsionado aún por la reciente posguerra, en una Latinoamérica y Argentina comprometida con una política como fue el primer gobierno peronista, que produjo en la Argentina un cambio significativo mas allá de la valoración o acuerdos que uno preste con esto, muestra un modelo político diferente y una mujer que asume un lugar político que hasta ese momento no había sido ocupado por ninguna mujer en la historia Argentina.
Paulina: ¿Eso tiene consecuencias, en el judaísmo argentino?
Mónica: Tiene consecuencias, eso tiene consecuencias en la Argentina, seguramente tiene un reflejo en el judaísmo aunque la comunidad judía, organizada desde el punto de vista institucional, demora bastante en incorporar mujeres en espacios de decisión, en espacios de conducción, en espacios de administración de recursos. Las mujeres que tradicionalmente participan en la vida judía desde la llegada de la inmigración judía a la Argentina ocupaban básicamente espacios vinculados a la asistencia de niños, ancianos, actividades de grupos de mujeres, acompañando el desarrollo de las organizaciones y casi dedicado a organizar una celebración de Rosh Hashaná, un Seder de Pesaj...
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