No es novedad contar que la situación de los cristianos de la Franja de Gaza, bajo gobierno de Hamas, es difícil y preocupante. No se asemeja a la que viven en lugares donde las matanzas son cuestión de todos los días y la persecución es abierta y explícita, pero el problema existe y sería un error aguardar a lo peor para encender la luz de alarma.
Compartimos hoy con los lectores un claro testimonio al respecto, que nos brindó una joven palestina cristiana, Amira Farhud, estudiante en el Colegio Bíblico de Belén. Conocimos a Amira hace pocos años en uno de nuestros viajes a Belén y nos mantuvimos en contacto con ella, cautivados por su dinamismo y ganas de vivir.
Antes de Navidad la llamamos para recabar sus impresiones sobre la situación en su ciudad nos sorprendió contando sobre el viaje que acababa de realizar con otros 14 jóvenes miembros del coro del Colegio, a visitar a la comunidad cristiana de Gaza. Estaba emocionada por haber estado con sus correligionarios.. y preocupada por lo que escuchó de ellos.