Sr. Director
Tarde o temprano Israel tendrá que tomar medidas drásticas con el problema de los ortodoxos.
No puede ser que una democracia conceda los privilegios que Israel le otorga a este colectivo que apenas trabaja o paga impuestos, y sin embargo es decisivo políticamente.
Sus partidos boicotean cualquier intento de acuerdo de paz con los palestinos, y eso sin tener en cuenta la capacidad de desestabilización cotidiana que suponen.
Creo que las decisiones deben ser tomadas ya mismo, porque el índice de natalidad indica que van a ser mayoría en no muchos años.
Ese desbordado índice de natalidad los asimila a los radicales palestinos, que también echan mano conscientemente de la bomba demográfica.
Y lo peor son los ortodoxos antisionistas. Al menos los otros son más consecuentes, pero esto de vivir a costa del Estado al que no se reconoce, es una aberración.
¿No le parece?
Atte.
Javier Eliahu
Kiriat Motzkin