El Bicentenario de la Revolución de Mayo es sin duda una ocasión especial para escuchar al Dr. Atilio Molteni, Embajador de la República Argentina en Israel. Argentina co.il conversó con él sobre los temas más vigentes que atañen a ambos países.

El Dr. Molteni (69) - casado, dos hijos, tres nietos - es Embajador de Argentina en Israel desde 2003 y tiene una amplia experiencia en el campo diplomático.

Se graduó en Derecho y Ciencias Sociales en la Universidad de Buenos Aires.
En 1964 ingresó al Servicio Exterior. Entre los cargos y funciones que asumió en la Cancillería, se encuentran los de Director de Organismos Internacionales, Director de Ciencia y Tecnología y Director de Informática. Fue también Director de Seguridad Internacional, Asuntos Nucleares y Espaciales.

En el ámbito de la Presidencia de la Nación, fue titular de la subsecretaría de Inteligencia Exterior de la secretaría de Informaciones de Estado.

Además, prestó servicios en la embajada en Washington, el consulado general en Nueva York, Naciones Unidas, organismos internacionales en Ginebra, embajadas en el Reino Unido, México y Japón y se desempeñó como Embajador en Suecia y Turquía.


             Embajador Molteni - Enfoques comunes sobre el mundo y la paz

- Embajador, gracias por recibirnos y felicidades por el Bicentenario. ¿Alguna sensación especial desde Israel por la magnitud de la fecha patria?
- Creo que es muy interesante en estos 200 años que uno pueda participar en los festejos siendo el embajador argentino por el hecho de que Argentina e Israel tienen una vinculación especial no sólo por los muchos puntos en común que poseen en sus enfoques sobre mundo y sobre la paz, sino también porque Argentina tiene la comunidad judía más grande de Latinoamérica y a su vez hay en Israel una muy importante comunidad argentino-israelí que significa una de las bases de las relaciones mutuas. Es decir que celebrar los 200 años en ese marco tan especial es una sensación sumamente interesante.

- ¿A su entender, Argentina, al conmemorar el Bicentenario, después de todo lo sucedido allí durante el Siglo XX, va camino de volver al Espíritu de Mayo?
- Lo interesante que tuvo esa Revolución es que sentó las bases de un nuevo país. Hay todo un debate si Argentina en 1810 tenía las características de una nación. Puede decirse que a partir de ese momento las fue adquiriendo. Se fue nutriendo de una serie elementos históricos y corrientes humanas. Los objetivos de 200 años después no son los mismos, pero siempre es importante que exista un espíritu de libertad y de bienestar en toda la población similares a los que en su momento llevaron a nuestros patriotas a buscar desligarse del control español.


        "Siempre es importante que exista un espíritu de libertad y bienestar"

- Desde la crisis del 2001 y el accionar de la dirigencia kirchnerista y su modelo económico ¿cómo se mantienen esos lineamientos y sus objetivos ante la realidad cambiante de la política argentina?
- Lo cierto es que a partir de 2003 hay muchos términos positivos. La economía ha crecido a un nivel sin precedentes. El país está demostrando tener las características que le han permitido superar una crisis económica profunda y se desarrollan elementos muy favorables en las acciones del gobierno. Hay un aceptamiento del interés por los derechos humanos, un afianzamiento en el interés por una mejor distribución de la riqueza y también mucho trabajo en mejorar la calidad de educación.

- ¿De qué manera esos elementos influyen concretamente en las relaciones con Israel? principalmente en lo que respecta a Mercosur...
- Las relaciones están pasando por un muy buen momento. Eso se vio en la pasada visita del presidente Shimón Peres a nuestro país. Tuve la fortuna de acompañarlo y comprobar que allí se sintió muy bien al ver el gran cariño y el afecto de los argentinos hacia su figura y hacia el Estado de Israel. A su vez, en un período anterior, hemos estado negociando un acuerdo entre Israel y Mercosur que ya está en aplicación. En el caso argentino está siendo discutido en el Congreso y esperamos que muy pronto se proceda a su aprobación, porque seguramente será muy conveniente para las relaciones comerciales. En estos días llegará de Argentina una importante misión comercial que específicamente busca aprovechar las mejores oportunidades como producto de esa apertura que existe entre en Mercosur e Israel. También hay que tener en cuenta que las señales económicas en Europa son muy preocupantes y eso afecta a Israel, que es un gran socio comercial de Europa, pero también afecta a Argentina, cuyo 35% de sus exportaciones van dirigidas allí. Eso quiere decir que quizás Argentina e Israel tienen que buscar la manera de apoyarse en un momento muy difícil en las relaciones económicas internacionales.


      "Argentina e Israel deben apoyarse mutuamente para enfrentar la crisis"

- Cambiando de tema... ¿Qué es lo que falla a su entender en Argentina para que los dos atentados terroristas más grandes del país todavía no se hayan resuelto?
- Creo que hay que analisar eso desde una perspectiva del tiempo. Hay que tener en cuenta el momento en que esos atentados se efectuaron. Fueron los primeros grandes atentados internacionales. Hoy en día la comunidad internacional y Argentina están mucho mejor preparados para enfrentar una acción terrorista internacional de lo que estaban en los años '90. Se trataban de acciones de una envergarura de la cual no se tenía antecedentes. Puede decirse que no había una preparación suficientemente precavida para ese tipo de atentados. Entonces no existía, como hoy, una adecuada inteligencia internacional para evitarlos o para determinar inmediatamente a los responsables.

- ¿Considera que los atentados a la Embajada de Israel y a la AMIA fueron la antesala de una modalidad de terrorismo que después se instaló con mucha más fuerza en todo el mundo?
- Se trata evidentemente de células que actuaron fuera de su marco natural de acción. A su vez, hay que tener en cuenta que Argentina es un país que vive ciertos acontecimientos internacionales con especial intensidad. Tenemos la mayor comunidad judía de América Latina y también la mayor comunidad árabe. Felizmente Argentina tiene relaciones muy desarrolladas con ambas. Uno de los puntos básicos de la política exterior argentina es mantener una posición equilibrada en las controversias relacionadas con lo que sucede en Oriente Medio. Eso nos obliga a interpretar los sentimientos de ambas comunidades que viven con profundo interés y preocupación todo lo que sucede en esta región. Lamentablemente, ese mismo marco de relaciones humanas fue el que dio lugar a que se llevaran a cabo esos dos terribles atentados.


     "En los '90 no hubo una preparación precavida para ese tipo de atentados"

- Usted se desempeñó como titular de la Subsecretaría de Inteligencia Exterior de la Presidencia de la Nación... ¿Qué perspectivas ve para las relaciones entre Argentina y los países de Oriente Medio?
- Argentina tiene muy buenas relaciones con los países musulmanes con excepción de Irán. Se trata de una región muy amplia y conflictiva a la vez: la presencia de EE.UU en Irak, la de la OTAN en Afganistán y los problemas del desarrollo nuclear de Irán y todas las dudas que existen en la comunidad internacional acerca de sus verdaderas intenciones. Si lamentablemente Irán llegara a conseguir una capacidad nuclear ofensiva, eso podría significar un peligro inmediato en Oriente Medio no sólo para Israel sino también para una serie de países árabes que ven ese desarrollo con gran preocupación. En el Consejo de Seguridad de la ONU se está debatiendo sobre la capacidad y efectividad que podría tener la aplicación de sanciones para limitar las aspiraciones iraníes.

- Teniendo en cuenta su experiencia aquí en Israel... ¿considera que el terrorismo es el principal flagelo del siglo XXI?
- Si uno ve la evolución de los actos terroristas, se trata indudablemente de un problema muy grande. Dadas las caraterísticas que hoy tiene el mundo, un atentado terrorista puede ocurrir en cualquier sitio, sin limitaciones. Eso implica la enorme responsabilidad que tienen los Estados en proteger a sus poblaciones de esa posibilidad.


                "Un conflicto bélico con Irán sería muy arriesgado para Israel"

- ¿Teniendo en cuenta su larga experiencia en la Cancillería como Director de Seguridad Internacional y Asuntos Nucleares y como Presidente de la Comisión Plenaria de OIEA (Organismo Internacional de Energía Atómica) ¿es optimista con respecto a las negociaciones por el programa nuclear iraní o prevee un nuevo conflicto armado?
- Hay que reconocer que los iraníes han sido coherentes en el desarrollo de su política nuclear. Fueron muy hábiles en saber cuando negociar con la OIEA y cuando dejar de hacerlo. La OIEA es un organismo internacional serio con mucha experiencia, pero no tiene capacidad para imponer sanciones, eso es prerrogativa del Consejo de Seguridad, y allí no todos los miembros permanentes mantienen políticas similares. EE.UU, Francia y Reino Unido generalmente armonizan; no siempre. En cambio los intereses de Rusia y China giran sobre otro tipo de factores: territoriales, comerciales, energéticos, etc. Entonces habría que preguntarse si la comunidad internacional está lista para admitir a un Irán nuclear. Sin duda, Israel no lo está. Pero ello no implica que le convenga emprender una operación militar. Al contrario, considero que es algo demasiado arriesgado, y que además acarrearía consecuencias muy determinantes a nivel mundial en todos los parámetros. Considero que las sanciones, si son importantes, pueden ser mucho más efectivas y graves para Irán.

- Tomando en cuenta que usted fue también Embajador de Argentina en Turquía y que conoce muy bien la región... ¿Cómo evalúa las relaciones actuales entre Turquía e Israel después del reciente acuerdo de este país con Irán acerca del enriquecimiento de uranio?
- Turquía no tiene una capacidad nuclear desarrollada. Sin embargo, se trata de un país muy importante que desea influir en los acontecimientos de la región y del mundo de manera más determinante. Las relaciones bilaterales de Turquía con Israel son de gran importancia para ambos estados. La opinión turca es de sumo valor en esta zona.


             "Se trata de una relación viva... Los lazos se mantienen vigentes"

- Le tocó representar a Argentina en un país muy convulsionado como Israel; nada menos que durante dos guerras... ¿Qué experiencia recuerda como una de las más difíciles de su misión aquí?
- En realidad fueron tres guerras si contamos la de Irak en la cual, al iniciarse, no se sabía cual sería la reacción iraquí en relación a Israel teniendo el precedente de la primera Guerra del Golfo. Cuando uno es embajador se preocupa, entre otras cosas, por lo que le sucede a sus compatriotas. En la Guerra del Líbano en 2006, cuando el norte de Israel estuvo sometido a intensos ataques de misiles, una de la primeras víctimas fue una señora argentina; esas situaciones conllevan a grandes preocupaciones por lo que pueda suceder. Pero, a pesar de las guerras, considero personalemte que el período más difícil se desarrolló entre 2003 y 2005, durante el transcurso de la segunda Intifada; nadie se puede aislar de los terribles atentados terroristas que se produjeron entonces en Israel.

- ¿Cómo definiría los lazos actuales entre Argentina e Israel en todos los niveles: politicos, económicos, sociales y culturales?
- Creo que las relaciones están en muy buen camino. Tanto la comunidad judía en Argentina como los judíos argentinos radicados en Israel, cumplen funciones de nexo muy importantes que permiten desarrollar actividades, proyectos o expresiones culturales concretas. Además, se trata de una relación viva, porque los argentinos israelíes tienen la característica de seguir vinculados a la Argentina; los lazos se mantienen vigentes. Se trata de una comunidad muy buena y muy bien integrada.


                      "La presencia argentina es muy significativa en Israel"

- ¿Y las relaciones de la Embajada con la comunidad argentina radicada en Israel?
- Tomando en cuentas las limitaciones, tratamos de hacer lo mejor para estar presentes e identificar los elementos que puedan ser útiles para fortalecer esas relaciones. La presencia argentina es muy significativa en este país. Nosotros hacemos lo posible para llegar a aquéllos que pueden ayudarnos a enriquecer nuestro accionar, que son muchos.

- El argentino, igual que el israelí, tiene mucha fama de soberbio en el exterior... ¿Se percibe eso también en la diplomacia?
- Algunos dicen que la "viveza porteña" es similar a la "jutzpá israelí". Pero creo que mientras pasan los años y con la experiencia adquirida conviene dejar de lado la soberbia.

- En el curso de este año usted finaliza su cargo en Israel. ¿Cómo definiría su experiencia aquí?
- Mi permanencia en Israel ha sido muy rica; a diferencia de mi representación en otros países, ello me motivó a trabajar muy seriamente en un libro sobre la situación en Oriente Medio. Eso me llevó a interesarme y a estudiar muy profundamente la historia y los procesos que se vienen desarrollando en esta región tan complicada.

- ¿Algún mensaje especial para la comunidad argentina en Israel en esta fecha?
- Que sepamos festejar este especial 25 de Mayo con la felicidad propia de un evento de esta magnitud.