Furiosa. Cuando necesito de la casera para darle mantenimiento al departamento nunca la encuentro, pero cuando no, está ahí esperándome en la puerta cuando regreso del trabajo para venderme triques de catálogo.

Así, una simple fuga en el baño se convirtió en una inundación que destrozó, entre otras cosas, cualquier plan que yo hubiera tenido para el fin de semana.

El plomero me advierte que no debo usar nada relacionado con la tuberías de agua al menos por veinticuatro horas.

Un día y una noche sin servicio. Miro al plomero con cara de súplica, pero no es negociable el tiempo de espera.

T- 22

Dos horas de llamadas de última momento a conocidos para pedir asilo de 24 horas en sus casas pero no encuentro a nadie disponible que esté lo suficientemente cerca.

A punto de la histeria en mi pequeño drama doméstico, la realidad me hace una llamada. Mi madre me comunica que mi tío ha fallecido.

Al tío le diagnosticaron cáncer una semana, la siguiente se despidió de sus seres queridos y se fué.

Uno no puede más que admirar su valor ante la vida, frente a la adversidad.

En realidad, uno se pregunta si podrá aprender las lecciones que corresponden para honrar la memoria de quienes ama.

T- 17

Entre la confusión y la sensación de vacío salgo a buscar algo de comer. La verdulería está cerrada a la hora de rezos y yo quiero regresar a casa pronto para estar pendiente de las llamadas de mi familia, así que doy la vuelta derrotada comprando una bolsa de bamba y una lata de atún en la tienda de la esquina.

El duken (1) de la esquina muestra en su pantalla gigante escenas de las protestas en Turquía en vez del usual partido de fútbol.

Los jóvenes que juegan billar en la terraza checan sus teléfonos y comparan las imágenes que salen en el televisor con las que aparecen en redes, mientras, los viejos juegan cartas en la sombra discutiendo las mismas imágenes pero señalándolas con las manos y entre gritos de asombro.

T-12

Bien dice Orhan Pamuk que la defensa de la memoria compartida es también la defensa de quienes somos y quienes aspiramos a ser colectivamente.

Pero no hay lugar para lo comunitario en las mentes rapaces, y la muestra de ello está en aquellas vidas truncadas en la defensa del nosotros por encima del poder.

T-5

Las horas pasan y lleno el espacio con la ópera que a mi tío le gustaba mientras paso los ojos por las viejas fotos familiares; los momentos pasados se hacen vívidos en una tormenta de emociones.

Se aparecen frente a mí los episodios más terribles mezclados con los más hermosos y fugaces.
 
Mi madre me llama y me recuerda que el amor está hecho de miles de trozos de experiencias vividas en la alegría y otras en el dolor, porque el amor implica ambas.

Como las luchas que emprendemos por aquello en lo que creemos, aquellas cosas por las que nos sacrificamos, todas ellas están envueltas en nuestro compromiso con el otro.

Es entonces imperante tomar las lecciones que nos tocan: aprender a vivir con valentía y reconocerla en otros, enfrentar los retos y ser de servicio.

Por encima de todo, vivir con dignidad con, por, y para los demás

Descanse en paz Gustavo Gómez García.

(1) Duken: Cafetería- salón donde hombres árabes toman café y fuman mientras juegan o hablan.