Mark Regev, portavoz del Primer Ministro de Israel, Binyamín Netanyahu, lamenta el sufrimiento de la población civil en Gaza, pero considera que la responsabilidad no recae sobre Israel, sino sobre el liderazgo de Hamás que controla la franja palestina.

Regev afirma que la organización terrorista islámica coloca la guerra santa violenta contra Israel como prioridad por sobre el bienestar de la población palestina.

- Mark, se acaba de cumplir un año desde la guerra en Gaza. ¿Con qué espíritu analizarías lo sucedido y la situación actual? Recordemos que por un lado están las duras acusaciones de Israel a Hamás, inclusive por lo que no hizo desde la guerra para ayudar a la población, pero por otro están las escenas de la gran destrucción en Gaza, que son un hecho...
- No tengo ninguna duda de que la población civil de la Franja de Gaza sufre. La vida allí no es fácil. Pero creo que hay que preguntarse porqué. Desde muchos puntos de vista, la población de Gaza es víctima, así como lo fue la del sur de Israel, del régimen extremista de Hamás. El hecho es que el orden de prioridades de Hamás pone en primer lugar a la yihad violenta contra Israel, por sobre el bienestar y la calidad de vida de la población de Gaza. Mientras eso no cambie, los habitantes de Gaza seguirán sufriendo.

- Pones en el mismo nivel, los mencionas juntos, a los habitantes de Gaza y a los del sur de Israel. Si bien tenemos claro que fue la situación en el sur, bajo el peligro de los misiles Kassam disparados desde Gaza durante ocho años, lo que llevó a la guerra, no es fácil explicar el paralelismo. Este no resulta evidente, porque en gran medida, los números pintan un cuadro. Y los números de resumen de la guerra fueron 13 muertos del lado israelí y más de 1.400 del lado palestino, según la versión palestina, o más de 1.100 según la versión israelí. Esto, además de la destrucción muy grande en Gaza....
- Todos deben recordar que Israel no quería este operativo; nos esforzamos mucho para evitarlo. Sufrimos muchos años de misiles sin reaccionar. Recuerdo claramente que una semana antes de la acción, el entonces Primer Ministro Ehud Olmert habló directamente a una emisora de televisión en árabe y dijo: "Dejen ya de disparar. Paren, no disparen más, porque si no, tendremos que responder".

- Lo recuerdo. Tu estabas en ese momento, también, en la oficina del Primer Ministro. Eras el portavoz de Olmert justamente.
- Así es. Su declaración fue terminante. Pero la reacción de Hamás fue, unilateralmente, terminar con los entendimientos logrados a través de Egipto de calma en el terreno. Lo dijeron públicamente, anunciaron que no respetarán más  esos arreglos. Eso fue en palabras. En hechos, hubo una escalada en los lanzamientos. Hamás obligó a Israel a actuar.
Respecto a los inocentes muertos, claro está que fue algo lamentable. No queremos ver a inocentes sufriendo, pero hay que decir la verdad: Hamás adoptó una estrategia clara, en forma intencional, de poner en peligro a los habitantes, a los civiles de Gaza, porque construyeron su maquinaria de guerra en el seno de la población. Lo hicieron dentro de barrios habitados, escuelas, casas, mezquitas, usando intencionalmente a la población como escudos humanos.
Nosotros hicimos lo máximo que pudimos para impedir daños a civiles inocentes. Fueron cancelados operativos, lanzamos volantes desde el aire, hicimos llamadas telefónicas a la población para que se aleje de blancos de bombardeos donde el objetivo eran los terroristas y sus depósitos de armas y misiles. No vemos a los habitantes de Gaza como nuestros enemigos.

- Ahora, un año después, claro está que el transcurrido fue uno de los años más tranquilos para Israel en mucho tiempo. El Jefe del Servicio de Inteligencia dijo claramente que así fue, pero el General del Comando Sur estimó que es cuestión de tiempo hasta que la calma se vea interrumpida. ¿Es una tranquilidad frágil?
- Es indudable que el silencio actual es tenso. Hamás no ha cambiado, ha usado la calma actual para volver a armarse. Intentan conseguir misiles de mayor alcance y con cabezales más potentes. El mismo régimen déspota que mata a los ciudadanos iraníes en Teherán, envía misiles, proyectiles y armas a Hamás todas las semanas. Claro está que la calma actual es frágil. No tenemos ninguna ilusión respecto al carácter del régimen de Hamás en Gaza.
Es cierto que en el transcurso del 2009 ha vuelto la vida normal al sur. Claro está que hay cicatrices; una generación entera de niños que siempre tendrán traumas por la situación que vivieron durante años. Pero este año, por primera vez en mucho tiempo, niños en Sderot y localidades aledañas a la frontera, podían dormir una noche entera sin tener que levantarse por el ruido de las alarmas para correr al refugio o a la habitación segura. La calma lograda hizo posible volver a la vida normal, aunque sea una calma frágil.
Y de hecho, éste era el objetivo del operativo. La meta no era conquistar Gaza o derribar a Hamás, sino devolver la calma al sur. Por ahora hay calma, y eso es bueno.

- Israel ganó pues en seguridad, pero perdió muchos puntos en la comunidad internacional. Se le criticó en forma muy aguda y hasta se le acusó de crímenes de guerra.
- Hubo muchas críticas injustificadas contra Israel, mucha hipocresía. Lo vimos en el Informe Goldstone. Pero quisiera recordar que cuando el informe llegó a la Asamblea General de la ONU, la mayor parte de los países democráticos no aceptaron votar a favor de él. Si bien no tuvimos una victoria numérica, sí la tuvimos desde un punto de vista moral.
Recordemos algo sobre el organismo de la ONU que encomendó la investigación cuyo resultado fue el Informe Goldstone, la Comisión de Derechos Humanos. Todo aquel que vive en un régimen democrático que respeta los derechos humanos, sabe que ese foro nada tiene que ver con eso. Esta semana, el régimen iraní asesina a sus propios ciudadanos en las calles de Teherán, y la mencionada comisión no dice nada, así como no dice nada sobre las masacres en Darfur. Es una organización hipócrita, en el que el tono lo dan regímenes dictatoriales que no respetan los derechos humanos. Creo que no debemos sorprendernos de haber sido criticados, porque allí están representados regímenes como Siria, Cuba, Arabia Saudita, Somalia, que no toman en serio el tema de los derechos humanos.

- ¿Israel está condenado a hallarse en estas situaciones, mientras Hamás sea su enemigo en Gaza?
- Lamentablemente, mientras Hamás actúe en Gaza, mientras no cambie de actitud y coloque a la yihad contra Israel por sobre el bien del pueblo palestino, no tendremos más remedio que lidiar con esta situación.