Todo sucedió en un mismo día. Por la mañana Obama en declaraciones periodísticas se tiró contra Netanyahu y su política con los palestinos y de ampliación de los asentamientos, que atenta contra la paz y los intereses de Estados Unidos con los países árabes, no cuidó las palabras, no hubo medias tintas.

Horas después, por primera vez, Estados Unidos autorizó el traspaso a Israel de, entre otros armamentos estratégicos, de 700 bombas de alta penetración subterránea, las mismas que hace tiempo se negaba a suministrar. A buen entendedor pocas palabras; los símbolos son más efectivos; por un lado trabaja por un entendimiento nuclear con Irán; por otro le suministra a Israel el material que, en caso de ataque, desde el aire pueda perforar sus impenetrables refugios subterráneos.

Al atardecer se presentó en una sinagoga para declarar su apoyo incondicional hacía Israel y a los judíos, asegurando que hará «todo lo posible» para que Irán no tenga armamento nuclear.

También encontró tiempo para declarar que no es verdad que Estados Unidos está fracasando en su lucha contra el Estado Islámico (EI), si habla sobre ello es la confirmación que no tienen ni idea de lo que en la zona sucede, no es sólo una cuestión idiomática.

En Siria casi el 50% de su territorio en manos del EI, con importantes puntos estratégicos en su poder, avanzando y avanzando, todo un ejército organizado con fuerte apoyo exterior que no puede contra fuerzas que operan como guerrilla; nada orgánico, pero sí muchísimo dinero. En un solo día un avance territorial con más de 400 asesinatos, niños, mujeres, ancianos, violaciones, la violencia como marketing. Organismos de Derechos Humanos, ¿qué es eso?

Irak después del retiro de las fuerzas norteamericanas quedó servido para el avance terrorista islamista, un país abandonado a su suerte, un terreno apto en donde el EI en poco tiempo pasará a dominar en forma complete; sus vecinos ante la incertidumbre tiemblan.

Egipto, que tiene casi todo su Sinaí controlado por fuerzas terroristas que diariamente cambian su nombre, decenas de soldados egipcios que pierden su vida ignorando el por qué y en defensa de qué con su presidente Al Sisi como mejor aliado de Israel en contra de Hamás esperando que éste, en algún momento, sea su brazo Salvador; el mundo al revés.

Pero Al Sisi no las tiene todas consigo, en un comienzo su mano dura contra los Hermanos Musulmanes le dió resultados; ahora comprueba que resurgen para amenazar su presidencia; las condenas a muerte recién dictadas contra algunos de sus principales dirigentes en nada ayudan; más gasolina al fuego.

En Arabia Saudita, la línea roja que jamás permitirá que alguien intente traspasarla, a donde Estados Unidos vendió más armas de última generación y aviones que personal con capacidad de utilizarlas, los ataques suicidas ya comienzan a dejar decenas de muertos. Irán hacía Arabia Saudita también exporta no justamente petróleo, pero ello no les impide en el Yemen luchar contra el mismo objetivo.

El Rey de Jordania no ignora que él también es un objetivo en la mira de diferentes grupos terroristas, que la aparente tranquilidad de hoy puede en cualquier momento comenzar a cambiar, las 2/3 partes de su población son refugiados palestinos, un brillante caldo de cultivo.

La Autoridad Palestina (AP) en manos de un presidente que cada día pierde apoyo. Todas las encuestas indican que si hoy se realizaran elecciones Hamás las ganaría por lejos; un presidente para las relaciones públicas, para presentarse ante todos los organismos internacionales como el hombre bueno; simultáneamente solicita a la FIFA la expulsión de Israel; el presidente Blatter debió viajar de urgencia para intentar encontrar una solución política que lleve al retiro de la petición que no obligue a una votación, es parte de una exitosa y muy bien programada campaña internacional de desgaste de la imagen de Israel. Neuronas activas e inteligentes no sólo están en un solo lado.

Desde Líbano, por lo menos 120,000 cohetes en manos de Hezbolá mirando hacia el sur con alcance a cualquier punto del territorio israelí. Quienes pueden garantizar hasta cuándo estarán sólo oyendo comentarios sobre la salud de Nasrallah, adicionan muchos signos de interrogación a la ya de por sí preocupante situación.

Los tentáculos de Irán se mueven por derecha y por izquierda, las distancias no importan, Argentina puede dar fe de ello.

Bibi tiene frente a sí un panorama zonal muy conflictive; en un segundo todo puede cambiar; hay muchos piromanos dispuestos a encender la mecha; el problema radica en que el mismo panorama, la misma fotografía se lee y se analiza en forma muy diferente desde Israel que desde otros horizontes, las diferencias son tan enormes, tan diferentes como entre la paz y la guerra.

El gobierno de unidad nacional en Israel es para Bibi un objetivo dentro de ése análisis global, la recientemente formada coalición con la mínima mayoría parlamentaria es transitoria; en su mente, el convencimiento que sólo con grandes cambios políticos en la zona la seguridad de Israel puede garantizarse y eso no se hace hablando.

Dicen que estómago lleno corazón content. Si luego de disfrutar un exquisito salmón al horno, acompañados por knishes de papa y queso, sabores gourmet de marca registrada cuyas recetas vienen de herencia, por lo menos un 4 estrellas Michelin en manos de mi esposa preparado en homenaje a hijos y nietos; repito, si después de todos esos manjares escribo un comentario tan pesimista, es señal que el panorama debe ser mucho más negro.