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Un episodio alarmante


Es de esperar que la conmoción creada en Israel por el caso Chomsky, ayude a muchos a comprender las implicaciones de la actual coalición gubernamental de Israel, el gobierno más  derechista que ha existido desde la creación del Estado.
 

El reciente episodio relacionado con Noam Chomsky me ha causado una indignación tal que no puedo dejar de emitir mi opinión.

El hecho concreto, el impedir el pasaje por Israel a un profesor de fama internacional que se proponía dar clases en la Universidad Palestina de Bir Zeit, en el área de la Autoridad Palestina, es una muestra de autoritarismo y estrechez de miras intolerables, una de cuyas consecuencias inmediatas es que el Profesor Chomsky dará sus clases en dicha universidad por videoconferencia, desde Amán en Jordania.

Quiero aclarar que no comparto las ideas politicas de Chomsky y muchas de sus criticas, no ya a los gobiernos de Israel, sino a la existencia misma del Estado. Sin embargo, se debe señalar que en contraste con otros críticos, Chomsky se opone a la política del boicot académico a Israel y plantea que en tal caso, porqué no boicotear al M.I.T (Instituto Tecnológico de Massachussets) del cual es profesor. Es de suponer que en sus clases ha de reiterar sus críticas a Israel, pero ese no es un motivo válido para impedirle la entrada a Israel y el ulterior pasaje a la Autonomía Palestina. 

La gravedad del caso no se limita a ese hecho lamentable. El responsable directo de este y otros casos similares es el Ministro de Interior, Eli Yshai, que pertenece al partido Shás, un partido religioso ultraortodoxo, ligado  especialmente a las comunidades judías oriundas de Asia y África.

Por mi parte, no participo de ningún sentimiento de falsa superioridad de los judíos de origen europeo, ashkenazíes, sobre los de origen oriental; tenemos abundantes muestras de pensamiento retrógrado en ambas comunidades y de la existencia en su seno de tendencias enemigas a la "Ilustración" (el movimiento de integración de los judíos a la cultura universal humanista, proceso que comenzó a desarrollarse a partir del siglo XVIII).

Yshai ha expresado en más de una oportunidad que la concepción de mundo de los judíos ultraortodoxos otorga un contenido y una respuesta a todos los problemas de la vida, desde el nacimiento hasta la muerte, mientras que las tendencias modernas sólo crean desorientación y amenazan a la subsistencia del pueblo judío.

Personalmente no soy religioso, pero respeto a las personas creyentes. Sí me opongo a las corrientes fundamentalistas de todo tipo que hacen uso de la religión para apartar a un grupo humano del resto de la humanidad, transformando la fe en un proceso de dominio y de autoafirmación grupal exclusivista.

La ofensa hecha a Chomsky, no es sólo una muestra de miopía politica, sino que es parte de una lucha político cultural interna de Israel y que abarca también a sectores judíos en otros países. El judaísmo humanista es el que ha dado nacimiento a hombres de cuya contribución intelectual, la mayoría nos sentimos orgullosos, y que incluye entre otros a Chomsky, por sus aportes originales a la lingüística.

Podríamos agregar que el propio Herzl, el padre de la idea del Estado Judío, era básicamente un producto de la "Ilustración" influído por la ideas europeas predominantes en su época. A partir del desarrollo de la "Ilustración", se produjo un enfrentamiento y una lucha de poder de intensidad creciente con las autoridades religiosas ultraortodoxas, ashkenazíes o sefardíes, por el dominio de las comunidades judías. Hubo y hay muchos ejemplos de este enfrentamiento, antes del Holocausto y hoy en día en Israel, como una persistencia de estructuras que temen al cambio.

Es de esperar que la conmoción creada en Israel por el caso Chomsky, ayude a muchos a comprender las implicaciones de la actual coalición gubernamental de Israel, el gobierno más derechista que ha existido desde la creación del Estado.

Ante esta situacion hay una pregunta reiterada en mucha gente: ¿Porqué el  pueblo israelí, que en las encuestas se manifiesta mayoritariamente partidario de la paz, ha votado partidos que en su conjunto han conformado, como señalé antes, el gobierno más derechista de la historia de Israel?

Un intento de respuesta es que votaron así, en parte por temor, en gran medida real, ante las reiteradas amenazas a la existencia de Israel por parte de fundamentalistas musulmanes como Hamás, Hezbolá, y otros, y entes oficiales como el gobierno del Irán, temor que es políticamente instrumentado por la derecha israelí.

Otra explicación que se suma a la primera, es que votaron por identificaciones sectoriales: los judíos de origen oriental por Shás, el partido de Yshai; los oriundos de la ex Unión Soviética por el partido ultranacionalista "Israel Betenu" (Israel nuestra casa) de Avigdor Liberman, hecho común en países de inmigración, en los cuales los distintos grupos emigrantes luchan por su lugar en el conjunto de la sociedad.

La izquierda israeli ha estado de capa caída por múltiples razones, pero  hemos vuelto a ver manifestaciones de Paz Ahora y grupos similares y es de esperar que el caso Chomsky contribuya a alertar a mucha gente.