El grupo radical Estado Islámico (EI) publicó un vídeo con la decapitación del británico Alan Henning, secuestrado en diciembre pasado en Siria y el cuarto rehén occidental asesinado por los yihadistas en ese país desde agosto pasado.
Henning (47) era un taxista británico que trabajó en Siria como voluntario de una organización humanitaria.
La grabación, cuya autenticidad no pudo ser verificada y de un minuto y once segundos de duración, fue publicada en páginas web empleadas por los islamistas y se titula «Otro mensaje para Estados Unidos y sus aliados».
En el vídeo, Henning dice: «Por la decisión de nuestro Parlamento de atacar al EI, yo como miembro del público británico, pagaré ahora el precio por esta decisión».
Acto seguido, su verdugo, enmascarado y vestido de negro, afirma en inglés que «la sangre de David Haines (el anterior rehén británico ejecutado) está en las manos de primer ministro David Cameron, y ahora Henning será sacrificado y su sangre estará en las manos del Parlamento británico».
Al igual que en las ejecuciones anteriores, la víctima es decapitada en un lugar desértico al aire libre y parece que el verdugo es el mismo. Al final del vídeo, el EI presenta a un nuevo rehén, el estadounidense Peter Edward Kassing (26), en un escenario similar. El yihadista enmascarado agarra a Kassing del cuello y dirige unas palabras al presidente estadounidense, Barack Obama. «Iniciaste un bombardeo aéreo en Sham (Siria), que sigue golpeando a nuestra gente. Así que es un derecho que continuemos golpeando los cuellos de tu gente», amenaza el terrorista.
Un portavoz de la familia explicó que Kassig es un veterano del Ejército estadounidense que combatió en la guerra de Irak antes de abandonar las Fuerzas Armadas en 2007 por motivos médicos, según informó la cadena ABC News. En el año 2012, Kassig trabajó como voluntario y asistente médico en varios hospitales de la frontera siria con Líbano, donde atendió a refugiados palestinos y a ciudadanos sirios que huían de la guerra, entre otras actividades humanitarias. El joven fue secuestrado en octubre de 2013 cuando se dirigía al este de Siria. Durante este tiempo la familia mantuvo silencio sobre su secuestro «por deseo de quienes retienen a su hijo», explicó el vocero.
Cameron afirmó que el «brutal asesinato» Henning a manos de EI «muestra lo bárbaros que son los terroristas» y prometió que Londres hará todo lo que esté en su mano para perseguir a los responsables.
«El brutal asesinato de Alan Henning por parte de Estado Islámico muestra los bárbaros y repugnantes que son los terroristas. Mis pensamientos y oraciones están con la mujer de Alan, Barbara, con sus hijos y con todos los que le querían», afirmó.
El líder británico recordó que «Alan llegó a Siria para ayudar a personas de todas las religions» y advirtió de que Reino unido hará todo lo que pueda para cazar a estos asesinos y llevarlos ante la Justicia».
También Obama, también condenó el asesinanto: «Estados Unidos condena firmemente el brutal asesinato del ciudadano británico Alan Henning. Permaneciendo junto a nuestros amigos y aliados británicos trabajaremos para llevar a los perpetradores del asesinato de Alan junto a los asesinos de Jim Foley, Steven Sotloff y David Haines ante la justicia», subrayó el mandatario.
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