La Autoridad Palestina (AP) denunció en Naciones Unidas que la intransigencia, la mala fe y las acciones destructivas de Israel alejaron de manera significativa las posibilidades de alcanzar la paz y establecer la solución de los dos Estados.
«La situación en la región es crítica, marcada por la reciente agresión israelí a la Franja de Gaza - la tercera en seis años -, el impulso a la colonización de Cisjordania, incluyendo Jerusalén Oriental, los persistentes castigos colectivos, la represión y las provocaciones», advirtió el embajador en el organismo, Riyad Mansour.
El diplomático intervino en un foro de la Asamblea General de la ONU sobre la cuestión palestina, donde llamó a la comunidad internacional y al Consejo de Seguridad a actuar para evitar consecuencias impredecibles.
Mansour precisó que la violencia escaló en las últimas semanas, en buena medida por los intentos del Gobierno israelí de modificar la demografía, la identidad y el estatus de Jerusalén y los ultrajes de extremistas judíos en lugares sagrados como la Mezquita de Al Aqsa.
«Reiteramos que Jerusalén es el corazón de Palestina, su centro social, económico y cultural, así fue por siglos y seguirá como tal, el consenso mundial sobre su estatus es claro, Jerusalén Oriental no pertenece a Israel, es un territorio palestino ocupado desde 1967», afirmó.
Respecto a Gaza, recordó que los 50 días de bombardeos e incursiones terrestres de julio y agosto pasados provocaron más de dos mil 200 muertos, 516 de ellos niños, y devastaron la infraestructura.
Además, en ese territorio sus 1,8 millones de habitantes siguen encerrados y aislados por el bloqueo israelí y egpcio, subrayó.
El embajador también criticó «el empeño israelí en expandir sus asentamientos en Cisjordania, pese al rechazo mundial a esa campaña, calificada por la ONU de ilegal y contraria al Derecho Internacional».
«A todo esto habría que sumar las redadas militares diarias, el asesinato o las heridas a palestinos, la destrucción de propiedades y viviendas y las severas restricciones de movimiento», expuso en la Asamblea.
De acuerdo con Mansour, «corresponde al Consejo de Seguridad hacer valer su responsabilidad y mandato para poner fin a las acciones ilegales de los ocupantes.
Eso incluye su postura respecto al proyecto de resolución que presentamos al órgano de 15 miembros para fijar una fecha de cese de la ocupación, y de búsqueda de la solución de dos Estados, con las fronteras anteriores a 1967 y Jerusalén Oriental como capital de Palestina», dijo.
El diplomático sentenció que «ya es hora de acabar con el conflicto y de permitir al pueblo palestino conocer la justicia, la paz, la seguridad, la dignidad humana y la libertad».
Mansour agradeció los esfuerzos de la comunidad internacional para encontrar una salida a la crisis.
La Asamblea General y el Comité de la ONU para el Ejercicio de los Derechos Inalienables del Pueblo Palestino dedicaron sesiones al Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, que se celebra el 29 de noviembre.
La Asamblea fijó la fecha porque ese día de 1947 el propio órgano aprobó la partición de Palestina, después de la salida de los británicos.
Notas relacionadas:
Israel cooperará con la ONU en investigación de guerra en Gaza
ONU: Anuncio de asentamientos cuestionan deseo de paz de Israel
AP: Reunión urgente en la ONU por «provocaciones» de Israel