El grupo terrorista Estado Islámico (EI) difundió video en el que exhibe la ejecución de un joven árabe israelí al que acusó de ser espía del Mossad. El verdugo fue un niño de unos 11 años.

A través del video, los yihadistas mostraron a un joven al que presentaron como Mohammed Said Ismail Musallam (19), residente en Jerusalén Este.

Previo a ser ejecutado por el menor, el joven, vestido de color naranja, como es habitual en este tipo de videos del EI, relató cómo lo reclutaron los servicios de inteligencia israelíes. También indicó que su padre y su hermano mayor lo incentivaron.

Musallam dijo que logró entrar en el territorio controlado por el EI en el norte de Siria gracias a un traficante local que le ayudó a cruzar la frontera desde Turquía. Pero fue descubierto rápidamente porque cometió el error de intentar ponerse en contacto con su familia».

Asimismo, el presunto espía israelí señaló que fue detenido e interrogado y que confesó que trabajaba para el Mossad por lo que fue condenado a muerte por uno de los tribunales islámicos que los terroristas impusieron en las zonas bajo su control.

Luego, en el video se muestra como Musallam es llevado a un espacio abierto y allí recibe un disparo en la cabeza por un niño, descripto por otro terrorista como uno de los «cachorros del califato».

Además de la ejecución, se observa un plano del pasaporte de la víctima, así como una lista de nombres acompañados de fotografías de hombres presentados como espías de Israel.

Por su parte, otro yihadista que habló en francés, se refirió en el mismo video, al atentado contra el supermercado kósher en París en enero, en el que murieron cuatro personas, además del autor del mismo. En ese marco amenazó con atacar a los israelíes y con «conquistar Jerusalén».

Los padres de Mohammed Said Ismail Musallam negaron que su hijo trabajó para el Mossad. Nuestro hijo es inocente. El Estado Islámico lo acusó porque intentó fugarse», dijo la madre, sin negar que su hijo interrumpió el servicio civil israelí para volverse yihadista en Siria.

«Varias decenas de árabes israelíes se incorporaron al EI», afirmó el el ministro de Defensa israelí, Moshé Yaalon, luego de que la organización anunció la ejecución de Musallam.

«Algunos se enrolaron al EI y fueron a luchar a Siria y a Irak. Varios de ellos perdieron la vida, otros fueron arrestados a su regreso o antes de partir, pero no se trata de un fenómeno extendido entre los árabes israelíes», declaró el ministro a la radio pública.  

Yaalón consideró que «no es díficil difundir las ideas del EI, incluso en Israel, gracias a internet».  

En relación con que Musallam trabajaba para el Mossad, Yaalón desmintió las acusaciones.

«Ese joven no tiene nada que ver con el Mossad ni con ninguna institución vinculada a la seguridad de Israel», afirmó el ministro.

Un portavoz del Shin Bet inform que la víctima partió el 24 de octubre hacia Turquía, desde donde pasó a Siria y que, según las informaciones israelíes, se unió al EI por su propia iniciativa y a espaldas de sus padres».

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