La mayoría de la población en países donde predomina la religión musulmana tiene una opinión desfavorable del grupo yihadista autodenominado Estado Islámico (EI), reveló una reciente investigación.

La encuesta de Actitudes Globales del Centro de Investigación Pew encontró que más de tres cuartas partes de los encuestados en la Autoridad Palestina (AP), Jordania e Indonesia desaprueban al grupo extremista, al igual que el 91% de los árabes e israelíes.

En Líbano, el índice de desaprobación fue cercano al 100%, a pesar de que la investigación se realizó antes de los recientes atentados en Beirut.

Casi todos los cristianos y los musulmanes chiítas que respondieron la encuesta en Líbano tenían una opinión negativa del grupo. Lo mismo pasó con el 98% de los sunitas libaneses.

Nigeria fue el país que expresó el apoyo más fuerte para el EI, a pesar del conflicto armado que protagonizan los militantes islamistas de Boko Haram, afiliado al grupo yihadista.

Según Amnistía Internacional (AI), 17.000 personas murieron por causa de ese conflicto y millones fueron desplazadas.

Pero un 14% de los nigerianos dijo tener una opinión favorable de la organización.

Una encuesta anterior del Pew reveló que Nigeria es uno de los países más religiosos del mundo, lo que tal vez explica la aceptación de la militancia religiosa de organizaciones como el EI.

«Hay un número de personas en Nigeria que no tienen una idea clara de lo que EI está haciendo y considera que buena parte de los reportes sobre dicha organización está influenciado por una visión occidental del islam», agregaron desde el instituto de investigación.

El dato que resultó más llamativo de la encuesta, sin embargo, es la actitud de Pakistán.

Aunque sólo el 9% de los paquistaníes expresó una opinión favorable sobre el Estado Islámico, el 62% declaró no tener una posición sobre el EI.

Una gran proporción de este grupo de paquistaníes indecisos puede ser simpatizante o partidario de la organización.

«Estos días deben ser realmente difíciles para cualquier militante en Pakistán a causa de la represión del gobierno, por lo que no desean exhibirse a sí mismos como partidarios del EI, incluso en una encuesta supuestamente anónima», valoran expertos del instituto.

«Los demás indecisos también pueden tener sospechas del repentino crecimiento del Estado Islámico y su éxito en el campo de batalla», agregan.

«¿Quién puede apoyarlos y allanar el camino para tan rápido progreso? Con potencias internacionales detrás de lo sucedido en Afganistán y fuerzas como Pakistán respaldando el surgimiento de los talibanes afganos, la sospecha general es que podría existir otro poder usando el EI para promover su agenda», explican.

«La gente cree que hay algún método detrás de esta última locura. Esto podría ser una razón para la indecisión por parte de tantos paquistaníes», añaden.

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