El primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, agradeció al Shin Bet su «duro trabajo y profesionalidad» que permitió llevar a cabo con éxito el bombardeo en Rafah, en el sur de Gaza, en el que murieron tres altos dirigentes de Hamás responsables de numerosos ataques contra Israel.

«Los datos reunidos por el Shin Bet a través de su duro trabajo y profesionalidad, junto con la capacidad de ejecución de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), nos permitieron llevar a cabo esta operación contra líderes de Hamás que orquestaron ataques mortales contra israelíes», dijo Netanyahu y dio las gracias «en mi nombre, y en el de todos los ciudadanos israelíes».

Preguntado por periodistas un día antes, Netanyahu se refirió al ataque perpetrado contra el comandante militar de Hamás, Mohamed Deif.

«Los líderes de Hamás no sólo son objetivos militares legítimos, sino que son nuestra prioridad. Ninguno de ellos es inmune», aseguró.

Por su parte, el ministro de Defensa, Moshé Yaalón, resaltó que los tres comandantes militares de las brigadas Izz a-Din al-Qassam, brazo armado de Hamás, «eran responsables de graves ataques contra ciudadanos y soldados israelíes, incluido el secuestro de Gilad Shalit», el militar capturado en la frontera con Gaza en junio de 2006 y liberado en octubre de 2011.

Así las cosas, Yaalón aseguró que Israel seguirá «persiguiendo y golpeando a líderes de Hamás donde quiera que estén».

«La suerte está echada para cualquiera que intente dañar a los ciudadanos de Israel. Tienen que saber que no cesaremos y que no descansaremos hasta que les tengamos», señaló.

Asimismo, el ministro de Defensa pidió paciencia a los ciudadanos, ya que la operación en Gaza «será larga» pero tiene «un único objetivo: devolver la calma y la seguridad a Israel».

Según informó el portavoz de las FDI, el capitán Roni Kaplan esta mañana a través de su cuenta en Twitter, «al menos 231 cohetes fueron disparados contra Israel desde que Hamás puso fin al alto el fuego el pasado martes».

«De ellos, 37 fueron interceptados por Cúpula de Hierro, mientras que 16 cayeron dentro de Gaza», agregó Kaplan.

Además, un hombre de unos 30 años sufrió heridas de gravedad en el pecho al resultar alcanzado por las esquirlas de un cohete en el Consejo Regional Eshkol.

El hombre, que estaba en un jardín de infantes de un kibutz junto a su mujer, en medio del festejo de un cumpleaños, salvó la vida de una maestra y de varios niños, a los que consiguió meter en el refugio durante los 15 segundos de alarma.

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