El ministro de Turismo israelí, Uzi Landau, y el patriarca latino de Jerusalén, Fouad Twal, se reunieron para estudiar los detalles del viaje del Papa Francisco a Tierra Santa el próximo mes de mayo.

El encuentro en la sede del patriarcado es el segundo que mantienen el ministro y el patriarca tras el que tuvo lugar en octubre pasado, informó un vocero del ministerio.

Landau y Twal y discutieron también sobre otros temas, como la «dimensión universal» que supone la ciudad de Jerusalén en «la construcción de puentes hacia la paz y en la mediación intercultural».

«Juntos haremos todo cuando esté en nuestras manos con el objetivo de facilitar el camino a los peregrinos y para que el acceso a los lugares sagrados sea posible para todos», afirmó Twal.

Por su parte, Landau subrayó la importancia «tanto para ciudadanos como para peregrinos» de acceder a los lugares santos con «total seguridad».

Sobre la huelga de funcionarios del ministerio de Exteriores israelí que, según medios locales, podría llegar a provocar la cancelación del viaje papal, Landau se mostró optimista y aseguró que el fin de la protesta «está próximo».

Según el diario «Haaretz», la decisión de los funcionarios de no colaborar en la organización de eventos con el Gobierno, los servicios secretos y el Ejercito podría impedir la visita.

En ese sentido, un portavoz del Vaticano corroboró el anuncio de la oficina de prensa de la Santa Sede que, el pasado día 7, aseguró que el viaje del Papa Francisco sigue su curso y que «nada cambia» por la huelga israelí.

Además, el gabinete de comunicación vaticano anunció que en los próximos días está previsto que viaje a Israel una delegación de la Santa Sede, encabezada por el responsable de los traslados del Papa, Alberto Gasbarri, para preparar los aspectos logísticos de la peregrinación.

El viaje, que se efectuará entre el 24 y el 26 de mayo, incluye visitas a Ammán, Belén y Jerusalén, y será el segundo desplazamiento internacional del Sumo Pontífice tras el del pasado julio, cuando acudió a la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro.

La intención del Papa Francisco es rememorar, cincuenta años después, el encuentro en pro del ecumenismo que en 1964 celebraron el Papa Pablo VI y el patriarca ortodoxo de Constantinopla, Atenágoras I.

El Papa Francisco será el cuarto pontífice de la era moderna en visitar Tierra Santa.

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