El presidente de Siria, Bashar al-Assad, responsabilizó a grupos terroristas que impiden una solución pacífica al conflicto en Siria, según hizo saber al enviado de la Liga Árabe y ex secretario general de la ONU, Kofi Annan, al término del encuentro mantenido en Damasco.

El presidente, no obstante, reiteró que está preparado para conseguir que cualquier esfuerzo honesto de paz sea un éxito.

Assad aseguró a Annan que «ningún diálogo político o actividad política podrán tener éxito mientras grupos terroristas armados sigan operando y extendiendo el caos y la inestabilidad».

El enviado de la Liga Árabe y ex secretario general de la ONU, Kofi Annan, llegó a Siria para reunirse con Assad en un intento de poner fin al conflicto armado en el país que ya se cobró la vida de 7.500 personas en los últimos 11 meses.

Annan también se verá con representantes de la oposición y líderes de la sociedad civil antes de abandonar Siria, explicó el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, en declaraciones ante los periodistas posteriores a una conversación mantenida con el propio Annan y con el secretario general de la Liga Árabe, Nabil El Áraby.

El enviado de los países árabes y la ONU reclamó desde su nombramiento una solución negociada al conflicto sirio, desatado hace un año en el marco de la denominada «primavera árabe». Sin embargo, la disidencia descartó la apertura de cualquier diálogo con el régimen de Assad por la violencia con que sigue reprimiendo las movilizaciones.

Naciones Unidas atribuye a las fuerzas del Gobierno la muerte de más de 7.500 personas desde el arranque del conflicto. Damasco, por su parte, dijo en diciembre que habían fallecido más de 2.000 soldados y policías por las acciones de grupos terroristas armados.

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