Khaled Mashal, el líder político de Hamás en el exilio besó el suelo de Gaza y prometió a su pueblo la «liberación de Jerusalén y Cisjordania», en su primera visita el enclave palestino, que le recibió con honores de jefe de Estado.

Decenas de miles de palestinos recibieron al jefe del movimiento que gobierna Gaza desde el exilio. Es su primera visita a la Franja en 45 años.

Además del primer ministro de Hamás en Gaza, Ismail Haniyeh, altos cargos de todas las facciones palestinas - incluida la rival Al Fatah que encabeza el presidente Mahmud Abbás y gobierna en Cisjordania - acudieron a recibir a Mashal, en una poco habitual muestra de unidad y de apoyo público al movimiento islamista.

«Sin todos ustedes hoy no estaría aquí. Les debo a todos los miembros de las milicias de los grupos de la resistencia palestina armada. Hoy es Gaza y mañana, serán Cisjordania y Jerusalén», dijo Mashal en una rueda de prensa conjunta con Haniyeh, celebrada en Rafah, nada más cruzar al territorio.

«Visitar Gaza es el tercer nacimiento en mi vida. El primero fue cuando nací; el segundo cuando renací después de que Israel intentase asesinarme en 1997, y el tercero es hoy. Espero que mi cuarto nacimiento sea cuando liberemos toda Palestina», afirmó.
Haniyeh calificó la visita como «un momento histórico y un punto de inflexión para el pueblo palestino hacia la liberación de toda Palestina».

«Hoy Mashal y todos mis hermanos están pisando el suelo de Palestina y continuaremos con nuestros pasos y gritaremos en la cara de la ocupación para liberar nuestra tierra ocupada», dijo Haniyeh, que aseguró que este es un día «de dignidad, victoria y orgullo».

Mashal, que vivió en el exilio durante los últimos 45 años, calificó a la población de Gaza como «un pueblo de resistencia, heroísmo y orgullo» y dedicó su presencia «a Gaza y sus tierras cubiertas de la sangre de los mártires, al pueblo de Gaza, que logró la victoria y venció al enemigo».

«Diga lo que diga, no haré justicia suficiente con Gaza, que sacrificó a sus mártires, con las madres que sacrificaron a sus hijos: gracias por recibirme», declaró.

Mashal viajó acompañado de familiares y de líderes de Hamás, entre ellos su «segundo», Mussa Abu Marzouq, e Izat Al Rishq, con los que permanecerá en la franja tres días, según informó el portavoz de Hamás, Sami Abu Zuhri.

Hamás trasladó a Rafah para recibir a Mashal los restos del coche destruido de Ahmad Jabari, su líder militar asesinado el pasado mes por Israel en el inicio de la operación «Pilar Defensivo».

Además, miembros de las fuerzas de seguridad islamistas, con armas ligeras y pesadas, enmascarados y con uniformes militares verdes, fueron destacados a lo largo de la carretera que va desde Rafah hasta Gaza capital, para garantizar la seguridad del convoy.

También se reforzó la seguridad en las principales calles de Gaza capital, donde Mashal visitó la casa del fallecido fundador y líder espiritual de Hamás, el jeque Ahmed Yassín, y la de Jabari.

Mashal tomará parte este sábado de las celebraciones del 25 aniversario de Hamás, que se cumple el próximo 14 pero que se adelantaron unos días para coincidir también con el aniversario de la primera Intifada.

El alto el fuego con Israel acordado el pasado mes con ayuda de la mediación egipcia dio seguridad al líder de Hamás para entrar en el territorio.

Según informó la radio israelí, otro dirigente palestino, Ramadan Shalah, líder de la Yihad Islámica, también tenía previsto viajar a la Franja para participar en las celebraciones.

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