El 70° aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial fue recordado por líderes mundiales que esta vez celebraron actos individuales en sus países, a diferencia de años anteriores, en los que se reunían para recordar la victoria de los aliados sobre la Alemania nazi que costó la vida a 50 millones de personas.
Alemania, derrotada en 1945 por el Ejército Rojo y sus aliados occidentales, recordó la capitulación alemana en un acto encabezado por la canciller, Ángela Merkel, y el presidente del gobierno, Joachim Gauck, en el Parlamento.
Las tensiones con Rusia por la crisis en Ucrania se hicieron más que evidentes este año y los mismos líderes que en 2005 viajaron a Rusia para conmemorar el 60° aniversario, anticiparon que esta vez no concurrirán al acto que en Moscú porque acusan al Kremlin de brindar apoyo a separatistas prorrusos de Ucrania, algo que Rusia siempre negó.
«No vivimos la guerra, la vemos como una realidad lejana, a veces abstracta, aunque no está tan lejos de nosotros, en Ucrania, en Oriente Medio, es decir, a cuatro o cinco horas de avión», declaró el presidente francés, François Hollande, durante la entrega de premios de un concurso sobre el impacto de la Segunda Guerra Mundial.
Luego asistió a la ceremonia principal, en el Arco del Triunfo, acompañado por el secretario de Estado norteamericano, John Kerry.
Las conmemoraciones del fin de la Segunda Guerra Mundial, en Europa, comenzaron desde el 27 de enero pasado, en Polonia, en recuerdo y homenaje a los 6 millones de judíos exterminados por los nazis, un millón y medio de los cuales fueron internados, torturados y asesinados en el campo de concentración de Auschwitz-Birkenau, liberado ese día por las tropas de la División de Infantería 322 del frente ucraniano del Ejército Soviético.
Cerca de 90 eventos conmemorativos de los ya casi tres cuartos de siglo de la victoria de los aliados sobre el nazismo tuvieron lugar sólo en Berlín, desde enero hasta esta segunda semana de mayo.
En Danzig, ciudad polaca, el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, inauguró la conmemoración, al lado del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon.
En Berlín, el plenario del Parlamento se juntó para escuchar al historiador Heinrich August Winkler, experto en historia alemana.
El discurso de Winkler tuvo como eje central resaltar que esta ceremonia no constituía el punto final del recuerdo de los alemanes acerca de su pasado ni el paso de página de la responsabilidad de sus habitantes.
«No hay ninguna justificación moral para no mantener vivo el recuerdo de aquellos hechos atroces en Alemania, ni tampoco para olvidar las obligaciones morales que se desprenden de ellos», dijo.
«La confrontación alemana no se cierra hoy y no se va a cerrar nunca», sentenció.
«Esos ataques obligan a no olvidar la principal lección aprendida de 1933 a 1945: La obligación de respetar la inviolabilidad de la dignidad de todos los seres humanos en todas las circunstancias», agregó Winkler.
Un grupo de cámara cerró la ceremonia con la interpretación de la Oda a la Alegría, parte de la Novena Sinfonía del compositor Ludwig von Bethoven, himno de la Unión Europea.
Rusia se dispone a celebrar el acontecimiento con el desfile militar más grande de su historia. El empedrado de la Plaza Roja acogerá hoy el alarde militar, pero los principales dirigentes mundiales, con la excepción de China, lo verán por televisión.
«China es el principal aliado de Rusia», afirmó el presidente Vladimir Putin, agradeciendo a su homólogo Xi Jinping su «atención personal permanente al buen desarrollo de las relaciones».
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, rindió tributo a la «generación que salvó al mundo del régimen nazi». El mandatario exhortó a los estadounidenses a seguir defendiendo las libertades por las cuales combatieron los héroes de la Segunda Guerra Mundial.
En un comunicado divulgado por la Casa Blanca, Obama recordó que hace 70 años las fuerzas aliadas declararon la victoria en Europa sobre la tiranía, después de seis años de «lucha brutal» que se cobró la vida de más de 60 millones de personas, incluidos seis millones de judíos asesinados por el régimen nazi, destacó.
«Hoy saludamos a los más de 16 millones de estadounidenses que dejaron todo lo que conocían, sus familias, sus casas, para servir en la Segunda Guerra Mundial», sostuvo.
«Estamos con nuestros aliados, en Europa y en todo el mundo, en la defensa de la libertad y los derechos humanos de todas las personas», subrayó.
Obama adelantó su tradicional alocución semanal por radio que se difunde los fines de semana para hacerla coincidir con este aniversario, que fue celebrado en Washington con una exhibición aérea de históricos aviones empleados durante la Segunda Guerra que volaron sobre el National Mall, el parque central de la ciudad donde se concentran los principales monumentos de la capital.
Miles de veteranos y curiosos se congregaron para ver el espectáculo aéreo y aviones claves que inclinaron la contienda bélica a favor de los aliados, como los bombarderos B-17 o los cazas P-51 Mustang.
Notas relacionadas:
Fin de 2ª Guerra Mundial dejó miles de crímenes sin castigo
Alemania se 'responsabiliza' de Segunda Guerra Mundial
Roma: Destacan Brigada Judía que contribuyó al fin del nazismo