«Las mujeres no deben ser diputadas ni participar en la política por respeto a las normas judías de modestia», afirmó el rabino ultraortodoxo israelí, Sholomó Aviner, uno de los principales líderes de la comunidad ultraortodoxa, en una conferencia con estudiantes.
«Una mujer no puede servir como miembro del Parlamento. Es inmodesto», aseguró Aviner.
La participación de las mujeres en la vida pública es contraria a la visión judía de que «gloriosa es la hija del rey en el interior del palacio», a juicio de Aviner, que dirige el seminario rabínico Ateret Cohanim en el barrio musulmán de la Ciudad Vieja de Jerusalén.
«No es sólo cuestión de ir a la urna, votar y volver a casa. Eso está bien. El problema es que hay encuentros, eventos públicos que son inmodestos, en los que mujeres y hombres se mezclan», aseguró el rabino.
La discriminatoria afirmación del líder ultraortodoxo levantó ampollas en la comunidad religiosa, varias de cuyas figuras se apresuraron a contradecirlo.
«Un liderazgo atento a la Torá considera a las mujeres una parte integral e importante de nuestra sociedad. En la sociedad de hoy, más que nunca, hay necesidad de liderazgo femenino de alto rango», señaló en un comunicado la organización de rabinos Hillel.
Liora Minka, presidenta de la organización de mujeres religiosas Emuná, aseguró que las declaraciones de Aviner ejemplifican el «anquilosamiento que sufren bastantes rabinos que dicen representar al movimiento sionista religioso cuyos pies no están en la realidad».
Según Minka, ese tipo de rabinos provocan «un distanciamiento entre la población general, incluidos grupos religiosos, y el liderazgo religioso conservador y estancado».
Las críticas llevaron al rabino a matizar sus declaraciones en una carta a una diputada que le pidió explicaciones.
Para Aviner, si bien la situación ideal sería la ausencia de la mujer en política, el hecho de que se les reserve puestos en las listas de los partidos crea «una obligación moral y nacional para garantizar que esos asientos sean ocupados por mujeres adecuadas que traigan bendiciones a la nación».
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