En cualquier otro momento, el arribo a Israel del futbolista portugués del Real Madrid, Cristiano Ronaldo, hubiera causado revuelo en el aeropuerto Ben Gurión, al cual se hubieran desplazado cientos de los numerosos seguidores que el club merengue tiene en el Estado judío.
Pero al parecer, la presencia en Israel del presidente norteamericano, Barack Obama, y el accionar de todos los medios locales, que siguen paso a paso su visita, determinó que la llegada del afamado jugador pase casi desapercibida.
Con todo, la selección de Portugal tiene este viernes un importante compromiso con su homóloga israelí por las eliminatorias al Mundial de Brasil y, a pesar de Obama, Cristiano fue ovacionado cuando bajó del autobús en Tel Aviv para ir al hotel y declaró que espera que su equipo vuelva triunfar tras una derrota y un empate.
«Si no ganamos, la eliminatoria se nos puede complicar», declaró a los periodistas.
Al Mundial de Sudáfrica 2010 Portugal llegó tras sufrir en un repechaje con Bosnia Herzegovina. Como no quiere pasar por la misma situación, el equipo que dirige Paulo Bento apunta a mejorar porque de lo contrario podría quedarse afuera de la próxima cita mundialista.
Disputados cuatro encuentros Portugal figura tercero en la tabla por diferencia de goles, ya que está igualado - detrás del líder Rusia, con 12 puntos - con Israel con 7 unidades.
«Matemáticamente es posible todavía, pero no depende de nosotros alcanzar el liderato. Más que desgastarnos con lo que no podemos controlar, debemos centrarnos en lo que depende de nosotros, que es llegar al Mundial por otra vía» declaró el entrenador portugues en referencia al repechaje que juegan los mejores segundos, y agregó que el encuentro con Israel «es importante, pero no decisivo».
Después deberá viajar a Azerbaiyán para enfrentarlo el próximo martes. Serán dos encuentros claves para que Cristiano pueda participar en el Mundial.
Pero hoy Portugal afronta bajo presión su partido frente a Israel en el Estadio Ramat Gan, y Bento aseguró que apostará por un fútbol ofensivo que se medirá ante la selección hebrea que como local pretende demostrar su fortaleza con jugadores como Dudu Aouate y Tomer Hemed entre sus principales estrellas.
El técnico de los portugueses contará con su once de gala a excepción del extremo del Manchester United, Nani, y con la única duda del centrocampista del Oporto, João Moutinho, cuyas molestias físicas le llevaron a retrasar su incorporación a los entrenamientos.
Por su parte, se espera que Israel jugará con un 4-3-3 para disipar las críticas contra el entrenador Eli Gutman, al que se le acusó tras su último compromiso contra Azerbaiyán de dedicarse a hacer un «bunker» en lugar de jugar al fútbol.
Gutman prometió un fútbol ofensivo para poder puntuar frente a Portugal. Para ello recurrirá también al centrocampista del Macabi Tel Aviv, Erán Zehavi, que sustituirá a Biram Kial.
«Ahora que digan si es o no un búnker. Venimos a jugar al fútbol», dijo Gutman en rueda de prensa, en la que destacó que si alguien se cree que va por un empate se equivoca. «No cedemos de antemano dos puntos», aseguró.
El partido se disputará al mediodía a petición de la Federación Israelí de Fútbol, debido a que de jugarse por la noche violaría la jornada del Shabat.
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