El preso palestino Mohammed Aalán, en huelga de hambre desde hace 60 días, recuperó el conocimiento y dio 24 horas al Gobierno israelí para que resuelva su caso, so pena de rechazar cualquier cuidado médico.
Al despertar, tras varios días de coma inducido, Aalán dijo a los médicos que continuará en huelga de hambre hasta lograr su liberación y que si no se halla una solución a su caso en 24 horas, pedirá que cese todo tratamiento.
Un médico del hospital Barzilai de Ashkelón, donde está hospitalizado el palestino, indicó que éste probablemente no sobreviviría si retoma la huelga de hambre tras salir del coma.
«Hasta el momento se negó a recibir tratamiento médico y a ser alimentado, pero bebía agua. Si deja de hacerlo, sus días estarán contados», explicó.
«Al despertar, y tras recibir explicaciones detalladas sobre su situación médica, aceptó tomar algunos complementos durante 24 horas, hasta que se halle una solución para su caso», añadió el médico.
Por el momento, los médicos le proporcionan nutrientes (sales, vitaminas y agua vía intravenosa) pero respetan su voluntad de no ser alimentado forzosamente.
Aalán (31), residente en Nablus (Shjem) y miembro de la organización terrorista Yihad Islámica, fue arrestado en noviembre pasado y comenzó una huelga de hambre el 18 de junio para denunciar la renovación de su detención administrativa.
Esta medida permite a las autoridades israelíes detener a civiles por un periodo de seis meses, renovable, sin una acusación legal.
La suerte de Aalán movilizó a la opinión pública e incrementó las presiones internacionales sobre las condiciones carcelarias en Israel.
El caso se convirtió en un rompecabezas de difícil solución para el Gobierno hebreo, que teme que su muerte avive aún más las tensiones entre palestinos e israelíes. La Yihad Islámica advirtió que si Aalán muere considerará rota la tregua vigente con Israel.
Liberar al palestino para evitar una nueva escalada de violencia podría ser interpretado, según el Ejecutivo israelí, como una cesión ante las exigencias de los presos palestinos.
Para evitar que la muerte de Aalán provocara una nueva crisis en Cisjordania, Gaza y en la comunidad árabe de Israel, el Parlamento aprobó una ley a finales de julio que permite alimentar a la fuerza a un huelguista de hambre.
El Gobierno hebreo podría aplicar esa nueva norma por vez primera en el caso de Aalán. Pero las organizaciones de defensa de los derechos humanos critican esa práctica, que consideran cercana a la tortura. La asociación que representa a los médicos israelíes se opone a dicha opción.
En un intento de encontrar una solución, el Ejecutivo israelí propuso liberar a Aalán si aceptaba exiliarse durante cuatro años. Al despertarse, el preso rechazó categóricamente esa propuesta.
Notas relacionadas:
Israel ofreció liberar a palestino en huelga de hambre si se va del país
Israel: Preso palestino en huelga de hambre entró en coma
Ley: Israel alimentará por fuerza a presos en huelga de hambre