El presidente de la Autoridad Palestina (AP), Mahmud Abbás, emplazó a la Asamblea General de la ONU a que reconozca a los palestinos como Estado no miembro del organismo internacional, lo que le abriría las puertas a acceder a distintas de sus agencias e instituciones.
El líder palestino no solicitó una fecha concreta para que se produzca la votación en el plenario y se limitó a enmarcarla en la presente sesión de la Asamblea General, que cerrará en septiembre de 2013.
Fuentes palestinas señalaron que la fecha elegida en principio para la votación sería el 29 de noviembre, cuando la Asamblea General se reúna con motivo del Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, pero Abbás no mencionó esa posibilidad en su intervención.
El presidente dijo mostrarse «confiado» en que «la gran mayoría de los países del mundo» lo apoyan en un paso cuyo objetivo es obtener «una paz justa» para los pueblos palestino e israelí.
Abbás centró la principal parte de su discurso en denunciar la campaña de ocupación llevada a cabo por Israel, cuya política está «dirigida como último objetivo a debilitar la Autoridad Palestina, destruyendo su capacidad de llevar a cabo sus funciones y cumplir con sus obligaciones, lo que amenaza con socavar su existencia y amenazar con su colapso».
El líder palestino subrayó que hablaba en nombre de «un pueblo enfadado, al que se le quitan derechos», y recalcó que «la independencia y la libertad del Estado de Palestina es un derecho sagrado de su pueblo que debe cumplirse ya que fue retrasado durante demasiadas décadas».
«Israel promete a los palestinos una nueva catástrofe, una nueva Nakba», sentenció Abbás en referencia a la huida o expulsión de sus hogares de unos 750.000 palestinos entre 1948 y 1949 durante la Guerra de Liberación entre Israel y los países árabes.
No obstante, dijo tener «una sincera intención de lograr la paz» con Israel, pero destacó que hace falta «un nuevo enfoque» para enfrentarse a la que quizás sea la última oportunidad de desbloquear las negociaciones.
Abbás solicitó al Consejo de Seguridad a adoptar «con urgencia» una resolución que comprenda «las bases y fundamentos de una solución al conflicto que sirva de referencia vinculante y guía si la solución de los dos Estados puede sobrevivir».
El mandatario recordó que hace un año pidió el ingreso como Estado miembro del organismo, un esfuerzo que quedó bloqueado en el Consejo de Seguridad, debido a «una gran polémica hostil de quienes estuvieron en contra de ese paso político, diplomático y pacífico por salvar el proceso de paz».
«Nuestra misión fue abortada pese a que la inmensa mayoría de los países del mundo nos apoyaban y continúan apoyando», aseveró Abbás en referencia al punto muerto en que quedó su petición ante el veto de Estados Unidos.
«Para ampliar las oportunidades de paz, continuaremos con nuestros esfuerzos para ser un Estado de pleno derecho en la ONU», añadió, al tiempo que defendió que su intención no es «deslegitimar al Estado de Israel, sino el de asegurar que se cree un Estado palestino».
Abbás aseguró que su pueblo continuará «con la construcción de las instituciones de un Estado y luchando por lograr una reconciliación nacional para restaurar la unidad de la nación».
Notas relacionadas:
Abbás: El proceso de paz está clínicamente muerto
Abbas: Netanyahu es el Primer Ministro israelí más difícil para negociar
Abbás: «Enfrentaré a Israel con medios diplomáticos»