Un grupo de 30 rebeldes sirios secuestró a 20 soldados de las fuerzas de paz de la ONU, de nacionalidad filipina, mientras inspeccionaban un puesto de observación dañado en la frontera con Israel en los Altos del Golán.

Es la primera ocasión en la que rebeldes sirios cometen un acto de hostilidad hacia los cascos azules, que controlan el área desmilitarizada en la zona. En las pasadas semanas Israel aumentó su nivel de alerta en esa zona, considerada una de las más estables en las pasadas décadas.

Los soldados secuestrados pertenecen a la Fuerza de las Naciones Unidas de Observación de la Separación (FNUOS), creada por el Consejo de Seguridad de la ONU en 1974 para controlar la línea de armisticio establecida entre Siria e Israel al finalizar la Guerra de Yom Kipur.

El contingente consta de 1.011 soldados, que en la actualidad proceden de los Ejércitos de Filipinas, India, Croacia y Australia. Desde que se formó la misión, hace casi cuatro décadas, fallecieron en total 43 soldados y un civil en misiones de paz en el Golán.

«Los miembros del Consejo de Seguridad exigen la liberación incondicional e inmediata de las fuerzas de paz detenidas y hacen un llamamiento a todas las partes a que cooperen con FNUOS de buena voluntad, y que le permitan operar con libertad y den garantías de la seguridad de su personal», afirmó Vitali Churkin, embajador de Rusia ante la ONU, en un comunicado leído ante los medios en Nueva York.

El Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, una organización opositora radicada en Londres, mantiene que los responsables del secuestro son las brigadas de los Mártires de Al Yarmouk. Éstas enviaron un vídeo al Observatorio en el que un rebelde informa del secuestro y dice que la condición para la liberación es que «las fuerzas del régimen de Bashar al-Assad se retiren de las inmediaciones de la villa de Jamla. Si no hay una retirada, les trataremos como prisioneros», añadió uno de los raptores, acusando a los cascos azules de ser colaboradores del régimen.

Jamla se halla a algo más de un kilómetro de la zona desmilitarizada y fue escenario, en las pasadas semanas, de enfrentamientos entre los rebeldes y el régimen.

El Ejército y los servicios de inteligencia de Israel consideran que grupos yihadistas radicales están aprovechando los avances rebeldes para fortificarse en la zona, con la intención de desestabilizar los Altos del Golán y atacar al Estado hebreo. El sábado cayeron cuatro proyectiles de mortero en esa región sin causar heridos.

El gobierno de Croacia dijo que tiene la intención de retirar a los 98 soldados que tiene en la misión de paz de FNUOS en el Golán. La decisión vino motivada porque el diario «The New York Times» publicó el mes pasado que Arabia Saudita había comprado armas a Croacia para entregárselas a los rebeldes que luchan contra Al Assad.

El Gobierno del primer ministro Zoran Milanovic, que negó que esa venta tuviera lugar, teme las represalias del régimen sirio y decidió que no es seguro para sus solados patrullar en los Altos del Golán.

Notas relacionadas:

Israel a la ONU: «No nos quedaremos de brazos cruzados»

Assad descartó renuncia y amenazó a Israel

Japón retira sus tropas de Altos del Golán