Israel desplegó en el área metropolitana de Tel Aviv una nueva batería de su sistema antimisiles «Cúpula de Hierro», después de que proyectiles disparados desde Gaza cayeran en el mar, cerca de la ciudad, según medios locales.

Hamás atacó en tres ocasiones la zona metropolitana de Tel Aviv y Rishon LeZion.

Ayer se sumó Jerusalén, ampliando cada vez más el radio de sus ataques, pues un misil de largo alcance disparado desde Gaza cayó en Gush Etzión, en un terreno una zona deshabitada al sur de la ciudad santa, minutos después de que las sirenas antiaéreas sonaran en la capital de Israel.

El cohete, de cuyo lanzamiento se hizo responsable el brazo armado de la organización terrorista Hamás, las Brigadas Izz al-Dín al-Qassam, impactó a cinco kilómetros de Jerusalén - muy cerca de una aldea árabe - y a 78 de la franja palestina.

El ministro israelí de Defensa, Ehud Barak, informó su homólogo estadounidense, Leon Panetta, de la operación militar en la franja de Gaza.

Según un comunicado del ministerio de Defensa, ambos ministroshablaron por teléfono y analizaron las consecuencias regionales que puede acarrear la ofensiva.

Barak aseguró que Israel está decidido a alcanzar los objetivos de la operación, entre los que figuran recuperar la capacidad de disuasión, destruir la infraestructura terrorista para el lanzamiento de cohetes contra Israel y proteger a la población civil.

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