El primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, que se encuentra de visita oficial en China, ordenó un cese temporal en la licitación de nuevos proyectos de asentamientos judíos en Cisjordania en contra del criterio de algunos de sus socios del Gobierno, según informó el diario «Haaretz».

La orden, que no fue confirmada públicamente, llega después de la iniciativa diplomática de Estados Unidos, principal aliado de Israel, por relanzar el proceso de paz entre palestinos e israelíes, estancado desde hace casi años y que tiene como uno de sus principales escollos la construcción y expansión de asentamientos.

Tampoco se conoce la vigencia de esta suspensión. Además, se descarta la paralización total de los asentamientos, como exige la Autoridad Palestina.

Altos oficiales israelíes dijeron a «Haaretz» que Netanyahu prometió al secretario de Estado estadounidense, John Kerry, frenar la construcción de asentamientos entre 8 y 12 semanas. No está claro desde cuándo contaría ese plazo.

El jefe de la diplomacia norteamericana se reunió este fin de semana en Washington con altos funcionarios israelíes, una cita que tuvo lugar un mes después de la visita a Oriente Medio del presidente estadounidense, Barack Obama.

Según la radio militar israelí «Galei Tzáhal», Netanyahu se reunió hace unos días con el ministro de Vivienda, Uri Ariel, y le instó a paralizar la publicación de nuevos proyectos de licitación para construir 3.000 viviendas en Cisjordania.

El propio Ariel vive en un asentamiento y es el número dos del partido ultraderechista Habait Haiehudí, formación que aboga por continuar construyendo en Cisjordania hasta el punto de que advirtió que no apoyará los presupuestos del Gobierno para 2013 si no se financian todos los proyectos.

La presión internacional para que Israel congele sus planes de construcción se incrementó además en las últimas semanas, especialmente después de que la Liga Árabe anunciase una modificación de su plan de paz de 2002 que incluye posibles intercambios de territorios dentro de las fronteras de 1967.

Tras la visita de Obama, los líderes palestinos se comprometieron con Kerry a no emprender ningún movimiento unilateral. Netanyahu, al parecer, aceptó por su parte un plazo sin licitar nuevos planes de construcción en Cisjordania, como ahora parece confirmarse.

En respuesta a estas informaciones, el jefe negociador de la Autoridad Palestina, Saeb Erekat, afirmó que Israel no notificó ningún cambio en su actividad de construcción de asentamientos.

«No fuimos notificados de cambios en los planes coloniales de Israel, incluyendo la construcción que se está llevando a cabo en decenas de asentamientos», manifestó.

«Necesitamos acciones, no palabras. Monitorizamos las actividades israelíes sobre el terreno de forma diaria», agregó Erekat, según «Haaretz».

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