Estados Unidos e Israel iniciaron un ejercicio aéreo conjunto de dos semanas denominado «Juniper Stallion 13», según confirmó el Ejército hebreo a través de un comunicado.

Según el informe, las maniobras conjuntas tienen lugar en la base de Ovdá, en el desierto del Negev, e involucran a un gran número de aviones de combate F-15 y F-16 de ambos países.

El simulacro de ataque aéreo, que se realiza con la participación de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y el Comando Europeo de los Militares de Estados Unidos (EUCOM), incluye maniobras de combate aire-aire, reabastecimiento de combustible en vuelo y bombardeos, entre otras misiones.

Las maniobras militares fueron precedidas por la visita a Israel del comandante del EUCOM, el general Philip Breedlove.

No es la primera vez que Israel y Estados Unidos realizan maniobras militares conjuntas. De hecho, el pasado mes de octubre llevaron a cabo sus mayores ejercicios militares en la historia de la cooperación entre ambos países.

Las maniobras en 2012, denominadas «Desafío Severo-12», costaron alrededor de 30 millones de dólares al Pentágono y cerca de 8 millones a las FDI, según datos proporcionados por el diario «The Jerusalén Post.

Entonces, el general de brigada israelí Nitzan Nuriel, máximo responsable de la parte hebrea en la preparación de los ejercicios conjuntos, afirmó que aquel entrenamiento era en sí mismo «un mensaje serio», en clara referencia a Irán.

Las autoridades hebreas señalaron en reiteradas ocasiones que podrían lanzar un ataque preventivo contra instalaciones nucleares de Irán, mientras que el Gobierno de EE.UU prometió apoyo a Israel en caso de iniciarse una acción bélica contra la República Islámica.

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