El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, aseguró que el presidente sirio, Bashar al-Assad, se comprometió a poner fin a la violencia «venga de donde venga» y se mostró dispuesto a dialogar con todas las fuerzas políticas del país y a anunciar, en breve, la fecha del referéndum constitucional.
Asimismo, Lavrov confirmó que Rusia está dispuesta a ayudar a resolver la crisis siria a partir de algunas de las propuestas contenidas en la iniciativa de la Liga Árabe y que el Gobierno de Damasco expresó su interés en mantener e incluso ampliar la misión del organismo árabe.
«Está claro que los esfuerzos para poner fin a la violencia deben ir acompañados de un diálogo vinculante entre todas las fuerzas políticas», declaró elcanciller tras reunirse con el mandatario sirio.
«El presidente Assad me ha confirmó su disposición para contribuir a esta labor y se comprometió plenamente a poner fin a la violencia venga de donde venga», añadió.
«Hemos tenido una reunión muy útil con el Gobierno de Siria en nombre del presidente Dimitri Medvedev», declaró Lavrov. «Hemos confirmado nuestra disposición a apoyar plenamente una rápida salida de la crisis a partir de las posiciones expresadas en la iniciativa de la Liga Árabe», manifestó.
«El presidente explicó que en los próximos días habrá una reunión con la comisión que elaboró el proyecto de Constitución y cuyo trabajo ya concluyó, y que pronto se dará a conocer la fecha del referéndum sobre este documento tan importante para Siria», declaró el ministro ruso.
Durante el encuentro, Sergei Lavrov declaró ante Bashar al Assad que «los dirigentes de los países deben ser conscientes de su parte de responsabilidad». «Ustedes son conscientes de la suya», agregó. «Es de nuestro interés que los pueblos árabes vivan en paz y en Concordia», dijo.
Lavrov llegó a Damasco acompañado del jefe del Servicio de Inteligencia Exterior ruso, Mijail Fradkov, con el objetivo de reunirse con Al Assad. La vista de produjo tres días después de que Rusia y China vetaran en el Consejo de Seguridad de la ONU una resolución árabe y occidental en la que se pedía la renuncia del mandatario sirio.
El objetivo del viaje, según el ministro ruso, era buscar «la vía más rápida para la estabilización de la situación en Siria a través de la introducción inmediata de reformas democráticas cuyo momento ha llegado».
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