El ex periodista Yair Lapid, la principal sorpresa de las elecciones celebradas en Israel al situar su partido de centro, Yesh Atid, como segunda fuerza política, aseguró que no usará sus 19 diputados para bloquear al primer ministro hebreo, Binyamín Netanyahu.
«Oí hablar de un bloque de centro-izquierda frontal. No formaremos ningún bloque con Hanín Zoabi», dijo en referencia a la diputada árabe que se encontraba a bordo del buque Mavi Marmara de la flotilla turca que fue abordado por soldados israelíes y en el cual murieron nueve personas en mayo de 2010.
En una declaración a la prensa en Tel Aviv, Lapid, que hizo coincidir sus palabras con los noticieros televisivos, señaló que «los resultados de las elecciones son claros», en alusión a la victoria con 31 escaños de Netanyahu y la lista Likud Beiteinu, con el 99,9% de los votos escrutados.
«Vi la rueda de prensa de Netanyahu y me alegro que habló de lo que de verdad es importante para nosotros y es importante para la gente que ama este país y quiere hacer de él un lugar mejor», señaló.
Apenas un día después de los comicios, Lapid desactivó así la propuesta planteada por la líder laborista, Shelly Yachimovich, de aprovechar el empate a 60 diputados entre el bloque de derecha y partidos ultraortodoxos y el que engloba a las formaciones de centro, izquierda y árabes para cambiar de primer ministro.
El canal 2 de la televisión israelí aseguró que Lapid apuesta por un Ejecutivo de coalición liderado por Netanyahu que excluya a los dos partidos ultraortodoxos, el sefardí Shas y el ashkenazí Iahadut Hatoorá, que actualmente integran el Gobierno y suman 18 diputados.
Esto abriría la puerta a legislar sobre el reclutamiento de los ultraortodoxos exentos del servicio militar, un tema que estuvo en el centro de su campaña electoral y con el que compartiría posiciones con los nacionalistas religiosos de Habait Haiehudí.
Likud Beiteinu, Yesh Atid y Habait Haiehudí sumarían 61 diputados, el mínimo pero suficiente para formar una coalición a la que podría unirse algún otro partidos, como Kadima, que finalmente consiguió su entrada al Parlamento con dos escaños.
Yachimovich, líder del Partido Laborista, tercera fuerza política con 15 diputados, había llamado a Lapid a aprovechar su presencia parlamentaria para sacar a Netanyahu del poder.
«Si te unes a Netanyahu serás responsable del colapso de la clase media. Si eliges la otra alternativa estaré a tu lado y ayudaré», aseguró.
Notas relacionadas:
Israel: Lapid, estrella indiscutible de elecciones
Triunfo de Netanyahu con Israel fragmentado
Netanyahu confronta dilemas de coalición