Un joven músico israelí de origen canadiense se convirtió en celebridad en Israel tras romper su guitarra en la cabeza de un terrorista palestino que atacó a civiles en Yaffo y Tel Aviv.
Yishai Montgomery (26) es ahora conocido como el «guitarrista héroe» por los medios y en las redes sociales.

Estupefacto por su gloria inesperada, agobiado por la cantidad de entrevistas que le son solicitadas, recibió una guitarra de regalo de parte de la estrella del rock canción israelí Aviv Geffen, y también se vio beneficiado de una colecta en internet que ya recaudó fondos por 5.000 dólares.

Montgomery se encontraba tocando sus instrumento en el paseo de Yaffo, suburbio muy turístico de Tel Aviv, cuando vio a un hombre agredir a varias personas con un cuchillo.

«Por un momento no comprendía si lo que estaba viendo era algo real", dijo Montgomery, quien de esta manera se vio en medio de uno de los innumerables atentados con arma blanca que desde hace unos cinco meses perpetran terroristas palestinos contra israelíes en el marco de una nueva ola de violencia.

Montgomery se recuperó de su sorpresa cuando el agresor se dirigió hacia él. Entonces, reaccionó asestándole un violento golpe en la cabeza con su guitarra, dejando circunstancialmente fuera de combate al atacante, y aprovechando para huir corriendo con su instrumento destrozado en una mano, al grito de «¡terrorista!», tras lo cual el palestino comenzó a correr por el paseo marítimo de Tel Aviv hieriendo a otros civiles hasta que fue abatido por la policía.

Un joven turista estadounidense resultó muerto y otras doce personas heridas en este ataque múltiple.

Desde el martes, «salgo de una entrevista para entrar en otra. Mi celular no para de sonar, mi cabeza ya no da más», explicó el joven de barba negra, con sus cabellos peinados hacia atrás, que viste jeans.

En algunos momentos, este muchacho un poco bohemio, que parece tocar su guitarra en la calle por simple placer, dijo añorar la calma de su residencia, cercana a Ashkelón.

Un sentimiento rápidamente alejado gracias a las propuestas de realizar grabaciones que dice haber recibido, las que podrían darle un empujón a su carrera, que se encontraba en punto muerto desde su regreso de Canadá, donde vivió durante tres años manteniéndose gracias a modestos trabajos temporales.

«No tengo proyectos definidos, estoy abierto a todos los cambios y a todas las propuestas», dijo.

Sin embargo, no deja de ser realista, y afirma: «soy una novedad, mañana todo el mundo me habrá olvidado».

«¡Me da igual! ¡Adoro las guitarras, y ya me regalaron cuatro!», agregó el «guitarrista héroe».