El primer ministro hebreo, Binyamín Netanyahu, subrayó que no contempla por el momento un alto el fuego con la organización terrorista Hamás y advirtió de que la Fuerza Aérea israelí seguirá con los bombardeos sobre la Franja de Gaza.
«En estos momentos, no voy a hablar con nadie sobre un alto el fuego», dijo Netanyahu a miembros de la Comisión de Exteriores y Seguridad del Parlamento.
Tanto Netanyahu como otros miembros de su Gobierno dejaron claro en estos últimos días que la operación «Margen Protector» está abierta, no sólo en cuanto a sus características - una posible invasión terrestre - sino también en cuanto a su duración.
El mandatario insistió en que ordenó un incremento de los ataques aéreos y agregó que no quiere caer en los errores de otros países como, por ejemplo, «en lo que los rusos hacen con los chechenos».
A su vez, el ministro de Defensa, Moshé Yaalón, mantuvo este jueves consultas con altos cargos de seguridad e insistió en que seguirán hasta que Hamás ponga fin a la escalada y asuma que Israel no tolerará el lanzamiento de cohetes.
Entretanto, advirtió de que quedan «largos días por delante» en los que Hamás y otros grupos seguirán con sus ataques terroristas.
Por su parte, las autoridades egipcias abrieron hoy el paso de Rafah, el único de la Franja de Gaza no controlado por Israel, para permitir el traslado de los palestinos heridos.
El portavoz del Ministerio del Interior de Hamás, Iyad al-Buzm, confirmó que Egipto mantiene abierto el paso de Rafah desde las nueve de la mañana. El objetivo es permitir que los heridos reciban tratamiento médico, así como paliar posibles necesidades humanitarias.
Desde el comienzo de la ofensiva aérea israelí sobre la franja, al menos 550 palestinos resultaron heridos, si bien la cifra prácticamente se actualiza de forma constante.
Las relaciones entre egipcios y palestinos vivieron altibajos en estos últimos años. Durante el último ataque de Israel sobre Gaza, en 2012, el entonces presidente de Egipto, Mohamed Mursi, condenó la agresión.
Sin embargo, tras el golpe miliar de julio de 2013, las autoridades egipcias bombardearon numerosos túneles de contrabando en la frontera de la franja y acusaron a Hamás de colaborar con los Hermanos Musulmanes, catalogado como organización terrorista.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbás, habló en los últimos días con el actual mandatario de Egipto, Abdel Fatah al-Sisi, para que colabore en el cese de hostilidades.
Al Sisi se mostró «preocupado» por la escalada de tensiones.
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