El grupo islamista Jund al-Khilafah (Soldados del Califato) reivindicó la matanza de la escuela judía Ozar Hatorah de Toulouse del pasado lunes en la que murieron un rabino y tres niños y cuya autoría se atribuyó al franco-argelino Mohamed Merah.
La organización, desconocida hasta que reivindicó el pasado noviembre dos atentados cometidos en Kazajistán, explicó en un comunicado difundido a través de Internet que las cuatro víctimas perdieron la vida a manos de una persona identificada como «Yusef el francés».
La matanza, según dijo este grupo, hizo «tambalear los fundamentos de los sionistas y los cruzados».
«Los crímenes de Israel contra nuestro pueblo en la tierra santa de Palestina, principalmente en Gaza, no quedarán impunes», añadió la organización en la nota, que tiene fecha del 22 de marzo.
Merah permaneció asediado durante más de 31 horas en una vivienda de Toulouse que finalmente fue asaltada este por fuerzas especiales francesas. El terrorista murió de un tiro en la cabeza después de que respondiese al ataque de los policías.
Durante estas horas de atrincheramiento, el terrorista se presentó ante las fuerzas de seguridad como un muyahidín vinculado con Al Qaeda y alegó que había perpetrado la matanza de la escuela judía y los asesinatos de tres militares en venganza por la situación de los palestinos, el despliegue de las tropas francesas en Afganistán y la prohibición del uso del velo integral en Francia.
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