El ejército de Siria batalla con grupos insurgentes que tomaron posiciones en los últimos días en Damasco. Las tropas del presidente Bashar al-Assad retomaron el barrio de Midan, en el centro de la ciudad, pero los rebeldes aseguran que están lanzando una ofensiva en otras partes de la capital siria.

Además, las fuerzas del gobierno lanzaron un asalto en la zona oriental de Jubar mientras se llevan a cabo fuertes combates en la segunda ciudad más importante de Siria, Alepo.

También se informó que el gobierno intensificó el asalto a Abu Kamal, el principal puesto de control fronterizo en la frontera con Irak.

Esto ocurre un día después de que los combatientes de la oposición se apoderaran de los cruces en la frontera de Siria con Irak y Turquía.

Mientras tanto, se comunicó que miles de sirios estan saliendo hacia países vecinos escapando de la violencia. Unos 30.000 sirios podrían haber cruzado hacia el vecino Líbano en las últimas 48 horas.

«Los informes varían entre 8.500 y 30.000 personas que cruzaron en las últimas 48 horas», dijo la portavoz de la agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Melissa Fleming.

Muchas personas también huyeron hacia Jordania. Una cantidad de armenios también abandonaron Siria luego de haber vivido allí durante generaciones.

El Consejo de Seguridad de la ONU extendió por un mes más su misión de observadores en Siria, aunque en círculos diplomáticos se reconoce que el plan de pacificación propuesto por la organización fracasó.

Entretanto, el presidente Assad perdió a otro de sus colaboradores más cercanos con la muerte del jefe de la Seguridad Nacional, Hisham al Ijtiar, por las heridas sufridas en el atentado del miércoles en Damasco.

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