Israel criticó la reunión de los países firmantes de la cuarta Convención de Ginebra relativa a la protección de civiles en tiempos de guerra, en la que se reclamó el respeto al derecho internacional humanitario en los territories de la Autoridad Palestina (AP).
«La conferencia es otro ejemplo de un mecanismo multilateral contaminado por una agenda anti-Israel, que aleja a las partes de las negociaciones y socava la universalidad e integridad de los Convenios de Ginebra», denunció el ministerio de Exteriores israelí, Avigdor Liberman.
«El hecho de que los principales signatarios de la convención se reunieron por la petición palestina es resultado de la presión árabe y tiene que ver con un deseo de obligar a Israel a sucumbir a un dictado político, poniendo en peligro la seguridad de los ciudadanos», agregó.
«Se trata de un ejercicio político que carece de todo fundamento sobre los Convenios de Ginebra. En lugar de fortalecer la ley internacional, socava el respeto por la misma. Fomentará los movimientos de la AP a otros organismos internacionales y enviará al presidente Abbás el mensaje de que una reacción unilateral es preferible a las negociaciones con Israel», añadió Liberman.
Por su parte, el ministro de Exteriores palestino, Riyad al-Maliki, expresó su satisfacción por la celebración de la conferencia, que tenía como objetivo «promover un entendimiento común con respecto al continuo incumplimiento por Israel del texto».
«La participación de la gran mayoría de los Estados es una reafirmación de la importancia de respetar el derecho internacional humanitario y la centralidad de la cuestión palestina en este sentido», indicó.
«Esta participación es una muestra del compromiso legal, moral y político con las obligaciones que todos los Estados tienen bajo la ley humanitaria de respetar y asegurar este respeto por la ley en cualquier momento o situación, sin excepciones», destacó.
Representantes de 126 países aprobaron en Ginebra una resolución sobre la necesidad de respetar el derecho humanitario en los territories de la AP y en Jerusalén Este.
Los Estados parte de la Convención de Ginebra se mostraron «profundamente preocupados por la construcción del muro de separación en Cisjordania y por el bloqueo a la Franja de Gaza, declarados contrarios al derecho humanitario internacional.
El texto aprobado reafirmó también «el carácter ilegal de los asentamientos israelíes y de su expansión».
Asimismo, criticó el comportamiento de todas las partes en conflicto en las hostilidades y recriminó específicamente «los ataques discriminados y desproporcionados, las destrucciones de bienes, los ataques a civiles y la utilización de escudos humanos».
Además, instó a Israel a garantizar que la población de la AP no quede bloqueada y puede acceder a asistencia humanitaria.
Australia, Canadá, Estados Unidos e Israel boicotearon el encuentro, al considerar que no ayuda al diálogo israelí-palestino.
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