Miembros de la Knéset de Kadima afiliados con el bloque de izquierda del partido elevaron duras críticas a su lider, Shaul Mofaz, tras su polémica decisión de unirse a la coalición liderada por Netanyahu.
El ministro de Asuntos Estratégicos Moshé Ya'alón dijo que Netanyahu actuó correctamente mediante la formación de un gobierno de unidad, pero criticó la forma en que ello se logró. «Estos actos desalientan la participación de la gente en la política y su voto. Cuando los líderes zigzaguean, socavan la confianza del público», dijo durante un evento cultural en Nes Ziona.
Orit Zuaretz, diputada de Kadima, se sumó a sus compañeros, los parlamentarios Shlomó Mula, Tibayev Robert y Nino Abesadze en criticar a su partido por unirse al gobierno.
Zuaretz, que regresó a Israel después de una visita a EE.UU, escribió al presidente del partido, Shaul Mofaz, en su página de Facebook: «Volví de una convención internacional en Boston, donde se presentó la lucha de Israel contra la trata de mujeres sólo para descubrir que en Israel la trata de personas se lleva a cabo justo frente al público. 28 diputados y 90.000 miembros de Kadima fueron subastados a Netanyahu».
«Si Kadima no hace del proceso de paz una condición para continuar nuestra colaboración en el gobierno, no hay nada para nosotros», dijo el diputado Shlomó Mula durante una conferencia que se celebró en Tel Aviv.
«Si Shaul Mofaz no traza una línea roja y dice que no hay ningún punto de debates sobre la legalización de asentamientos ilegales, entonces somos en esencia igual al Likud, y estamos ahí para blanquearlo. No tenemos nada que buscar allí, en la coalición», añadió Mula.
El diputado, que inicialmente consideró la votación en contra del nombramiento de Mofaz como ministro sin cartera y viceprimer ministro, dijo que «no vamos a ser capaces de promover cualquier cosa que destine fondos a los asentamientos».
«Cuando pedimos aprobar la legislación para los niños en situación de riesgo, nos dijeron que no hay dinero, pero ellos siempre encuentran presupuesto para construir otra vía de acceso a un puesto de avanzada ilegal en Nablus», dijo a los cientos de personas que asistieron a la conferencia planeada antes de la decisión del primer ministro, Binyamín Netanyahu, de suspender las elecciones de septiembre y firmar un acuerdo de unidad con Kadima
Mientras tanto, la nueva líder de la oposición, Shelly Yacimovich, exige la presidencia de la Comisión de Exteriores y Defensa de la Knéset, que dirigía Kadima antes de unirse a la coalición.
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