Israel rechazó las críticas europeas por la decisión del primer ministro Binyamín Netanyahu de expandir la construcción de sus asentamientos en respuesta al reconocimiento implícito de Naciones Unidas del Estado palestino.

Reino Unido, Francia, España, Suecia y Dinamarca convocaron a los embajadores israelíes en sus respectivas capitales para expresarles su desaprobación al plan de erigir 3.000 viviendas más en los asentamientos judíos de Cisjordania y Jerusalén Oriental, y de congelar los fondos que Israel recauda en nombre de la Autoridad Palestina.

Netanyahu dijo que Israel no cederá. «Israel continuará ateniéndose a sus intereses vitales, incluso frente a la presión internacional, y no habrá cambio en la decisión tomada», afirmó.

Enojado por la decisión de la Asamblea General de la ONU de elevar el estatus palestino en el organismo de entidad observadora a Estado no miembro, el primer ministro dijo al día siguiente que construiría nuevas casas para los habitantes de los asentamientos.

Unos 500.000 israelíes y 2,5 millones de palestinos viven en Cisjordania.

Netanyahu también ordenó a las oficinas correspondientes realizar «trabajos de plantificación» para la construcción de miles de unidades familiares en zonas que incluyen la denominada «E1» al este de Jerusalén.

Una construcción de este tipo podría partir en dos a Cisjordania, impidiendo a los palestinos el acceso a Jerusalén y perjudicando la creación de un Estado contiguo.

Ante la visita de Netanyahu esta semana, Alemania - considerada como el aliado más cercano de Israel en Europa - pidió al primer ministro evitar la expansión de los asentamientos y Rusia dijo que veía la medida del Estado judío con grave preocupación.

El ministro israelí de Finanzas, Yuval Steinitz, afirmó que Israel no puede permanecer indiferente a la maniobra unilateral de los palestinos en Naciones Unidas.

«Quiero decirles que esos mismos europeos y americanos que ahora nos critican por nuestra respuesta, comprenden completamente que tenemos que responder, y ellos mismos advirtieron a la Autoridad Palestina.

En Europa, el único país que votó en contra de la resolución de la ONU fue República Checa. Netanyahu también tiene planes de visitar Praga esta semana para expresar su agradecimiento.

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