El Comité Internacional de la Cruz Roja entregará 150.000 litros de combustible al ministerio palestino de Salud en Gaza para permitir que trece hospitales sigan funcionando.
En febrero pasado, la organización humanitaria entregó a las autoridades sanitarias palestinas una cantidad similar de fuel.
La única planta de electricidad de Gaza dejó de funcionar hace un mes a raíz de una importante disminución del suministro de diesel, que en los últimos años se obtenía sobre todo de contrabando a través de túneles en la frontera con Egipto.
Esta situación agravó la crisis energética en el territorio palestino, cuyo aprovisionamiento de combustible dependía en gran parte de Israel.
La Cruz Roja advirtió de que la imposibilidad de garantizar el suministro de fuel y electricidad puede llevar a la interrupción de servicios públicos esenciales, incluidos hospitales y abastecimiento de agua.
Lo más grave puede ser que se suspendan los servicios en bloques de cirugía, unidades de cuidados intensivos, áreas de atención a recién nacidos y hemodiálisis.
La organización instó a encontrar una solución duradera al problema y a evitar un mayor deterioro de la vida de la población.
Asimismo, pidió a los responsables políticos que el potencial impacto humanitario de una prolongada crisis energética esté por delante de cualquier consideración política.
Esta semana, la Autoridad Palestina anunció que había alcanzado un acuerdo con Egipto para atajar la falta de electricidad.
La solución pasaría por alimentar con gas, en lugar de diesel, la planta eléctrica a través de un nuevo gasoducto que partiría del norte de la península del Sinaí.
Sin embargo, el proyecto requiere al menos de seis meses para completarse y la Autoridad Palestina necesita 30 millones de dólares para su ejecución.
Notas relacionadas:
Gaza a oscuras - Central eléctrica cierra por falta de combustible
Egipto envía combustible a Gaza
Planta eléctrica de Gaza vuelve a apagarse por falta de combustible