La Casa Blanca informó que el vicepresidente norteamericano, Joe Biden, no asistirá por «problemas de agenda» al discurso que el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, pronunciará en el Congreso el próximo mes de marzo.
Además, docenas de representantes demócratas están privadamente amenazando su alocución del 3 de marzo, según afirmaron algunos legisladores, en lo que ya se convirtió en el punto más bajo de la relación entre el mandatario hebreo y el presidente Barack Obama.
Los congresistas demócratas tendrán que decidirse entre apoyar a Israel o a Obama públicamente, quien está tratando de llegar a un acuerdo con Irán para que limite drásticamente su programa nuclear, lo cual tiene una oposición vehemente de Netanyahu, quien expresó su preocupación por la «ingenuidad» del mandatario estadounidense.
El discurso fue planeado por el vocero de la Cámara, John Boehner y el embajador de Israel en Estados Unidos, Ron Dermer, para darle a Netanyahu una plataforma prominente a fin de advertir sobre los peligros del probable acuerdo con Irán.
Pero, según publicó «Haaretz»», el accionar del líder israelí está fundamentado en su percepción sobre un debilitamiento de Obama luego de su derrota en las elecciones de medio término, las cuales le dieron el control del Congreso a los republicanos, y su discurso está programado para dos semanas antes de los comicios en Israel, en donde Netanyahu busca su reelección.
La Casa Blanca ya le negó a Netanyahu un encuentro con Obama. Además, el secretario de Estado, John Kerry, no tiene planes de reunirse con él durante su estadía en Washington, de acuerdo a fuentes oficiales.
A su vez, siete parlamentarios demócratas judíos se reunieron con Dermer para trasmitirle su pesar por la decisión de Netanyahu.
Los siete criticaron la resolución y sugirieron que durante su visita Netanyahu se reúna en forma privada con legisladores norteamericanos en lugar de pronunciar un discurso en el Congreso.
En el encuentro participaron los congresistas Steve Israel, Jerry Nadler, Nita Lowey, Jan Schakowsky, Sander Levi, Ted Deutch y Debbie Wasserman, todos ellos considerados pro-israelíes.
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