El fiscal general de Israel, Yehuda Weinstein, se opuso a la postura de la ministra de Cultura y Deportes, Miri Regev, de retirar la financiación a instituciones culturales basándose en el contenido de las obras que acogen.
«Bajo la ley existente, la financiación estatal a instituciones públicas no puede depender del contenido de las creaciones mostradas en estas instituciones», señaló Weinstein.
Sus palabras coinciden con la investigación de un tribunal sobre la decisión de Regev - del partido Likud, el principal de la coalición del gobierno derechista israelí - de retirar la financiación al teatro Al Midán de la ciudad de Haifa, donde en junio se presentó un obra sobre el terrorista palestino Walid Daka, que en los años '80 secuestró y asesinó al soldado israelí Moshé Tamam.
A la polémica desatada le sucedió la intención de la titular de Cultura de suspender los fondos al Festival de Cine de Jerusalén si no se retiraba del programa un filme sobre la vida del magnicida Igal Amir, asesino del primer ministro Itzjak Rabín en 1995.
Según los medios, Weinstein aseguró que las propuestas sobre estas cuestiones deben ser analizadas y aprobadas en primer lugar por él y no puede estar en contra de la libertad de expresión.
Regev, por su parte, alegó no tener intención de interferir en el contenido o limitar la libertad de expresión. Pero cualquier conducta de instituciones culturales que no esté en consonancia con las leyes estatales será tratada en un proceso criminal.
La ministra aseguró, además, que «no existe conexión entre la libertad de expresión y la libertad de financiación» y aludiendo al fiscal afirmó que Weinstein «sabe que no puede interferir en las consideraciones del ministerio con respecto a las políticas de adjudicación de presupuesto de 2016».
La llegada de Regev al ministerio de Cultura estuvo rodeada de controversia tras sus intentos de condicionar la financiación de eventos culturales a su «patriotismo» y por declaraciones en las que mostró su falta de interés por el cargo y llegó a calificar a los artistas de «ingratos».
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