El pesidente sirio, Bashar al-Assad, «pagará un alto precio si se obstina a ignorar la voz de la comunidad internacional», advirtió la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, durante la conferencia internacional «Amigos de Siria» celebrada en Túnez.

Clinton, que en esa reunión ofreció 10 millones de dólares en ayuda humanitaria para Siria, quiso enviar un claro mensaje a Assad: «Pagará un alto precio por ignorar la voluntad de la comunidad internacional y violar los derechos humanos de su pueblo», afirmó.

La canciller norteamericana sostuvo además, que si el régimen sirio no se acoge al pedido internacional de permitir el acceso urgente de ayuda humanitaria a la población civil «sus manos se mancharán con más sangre».

La conferencia internacional «Amigos de Siria» nació como alternativa al veto de Rusia y China a una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para condenar al régimen sirio por la represión de las protestas que estallaron en marzo y que hasta el momento se cobraron entre 5.000 y 8.500 vidas, según distintas fuentes. La resolución exigía, además, la renuncia inmediata del presidente Assad.

La cumbre «Amigos de Siria», que reúne a unos 70 países y organizaciones internacionales, incluidos la Liga Árabe, la Conferencia Islámica, la Unión Europea y Estados Unidos, y en la que no participan China y Rusia, aboga por un bloqueo en la venta de armas, un embargo petrolero y la reducción de las relaciones diplomáticas, según el borrador del documento que se debate en Túnez.

En dicho borrador, los «Amigos de Siria» exigen a Damasco que cese inmediatamente toda violencia, se comprometa a poner fin a sus ataques y permita el acceso de ayuda humanitaria en las próximas 48 horas a las áreas más castigadas, como Homs, Deraa, Zabadani y otras zonas bajo asedio.

Asimismo, el grupo se comprometió a reforzar las sanciones para presionar al régimen sirio, incluyendo prohibiciones de viajes, congelación de bienes, interrupción de compra de petróleo, reducción de relaciones diplomáticas y prohibición de venta de armas.

La ONU y la Liga Árabe nombraron a Kofi Annan enviado especial conjunto a Siria. El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, aseguró que Annan «aportará su buen hacer para poner fin a toda violencia y violación de derechos humanos y promoverá una solución pacífica a la crisis».

En un comunicado, Ban agregó que «Annan llevará a cabo consultas amplias y hablará con todos los interlocutores relevantes tanto dentro como fuera de Siria para mejorar la situación humanitaria y promover una solución política inclusiva que satisfaga las aspiraciones democráticas del pueblo sirio a través de un diálogo político exhaustivo entre el Gobierno y todo el espectro de la oposición».