Tras una intensiva investigación encubierta sobre sus actividades, la policía israelí anunció la detención de 13 miembros y simpatizantes de la organización racista antiárabe, Lehavá.
Los arrestos forman parte de una operación contra la organización, que se convirtió en un símbolo del creciente sentimiento anti árabe, citó «Haaretz».
Las detenciones se produjeron en cinco ciudades diferentes de Israel, explicó la portavoz policial Luba Samri.
El pasado 16 de diciembre, el líder de esta organización, Bentzi Gopstein, fue detenido tras el incendio de una escuela bilingüe árabe-hebrea.
Desde el sábado por la noche, «ocho miembros de la organización Lehavá, sospechosos de incitación a la violencia y el terrorismo por motivos racistas, fueron detenidos a fin de ser interrogados», señaló Samri.
La policía detuvo también a cinco personas conocidas por haber participado en manifestaciones de Lehavá.
Esas «cinco personas, entre ellas cuatro menores, fueron detenidas en Jerusalén en posesión de armas blancas y droga», precisó la vocera policial.
Recientemente, se vinculó a la organización Lehavá con el incendio a fines de noviembre de la escuela bilingüe árabe-hebrea de Jerusalén.
Tres jóvenes detenidos y sospechosos de haber provocado el incendio son miembros de esta organización extremista, según el Shin Beth, el servicio interno israelí de seguridad.
Lehavá dice luchar contra lo que considera la pérdida de la identidad judía a través de las bodas entre judíos y árabes.
El grupo intenta romper parejas mixtas de árabes y judíos y hace campañas para evitar que miembros de las dos comunidades trabajen juntos.
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