«Estamos dispuestos a poner todo de nuestra parte y compartir lo que hicimos hasta ahora con el resto del mundo en ciencia, agricultura y tecnología», dijo el primer ministro Binyamín Netanyahu al finalizar su recorrido por el pabellón israelí de la Exposición Universal Milán 2015 en su visita a Italia.
El ministro israelí de Seguridad Interior, Gilad Erdán, sorprendió a la sociedad al elegir para próximo Jefe de Policía a una persona que no proviene de la institución sino de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), el brigadier general Gal Hirsch.
Hirsch, de 51 años, casado y padre de tres hijas, renunció a las FDI luego de la Segunda Guerra del Libano, en 2006, después de la cual fue duramente criticado por la Comisión Winograd por su accionar al mando de la División Galilea.
La ministra de Cultura de Israel, Miri Regev, pidió públicamente a Alemania que no permita que Daniel Barenboim dirija a la Filarmónica de Berlín en Teherán. La petición se hizo después de que medios alemanes informaron que posiblemente la Filarmónica tocará en la capital iraní próximamente, una vez que los países occidentales normalicen las relaciones con ese país.
El ministro israelí de Seguridad Interior, Gilad Erdán, pidió al titular de Defensa, Moshé Yaalón, que declare «organización ilegal» a los grupos palestinos que se manifiestan contra la presencia de israelíes judíos en el Monte del Templo de Jerusalén.
Estos grupos, conocidos en árabe como Murabitun, Murabitat y Protectores de la Mezquita al-Aqsa, están integrados por individuos que acuden periódicamente a dicha Mezquita y al Domo de la Roca para evitar que los judíos recen en la zona.
El presidente israelí, Reuvén Rivlin, dio un fuerte apoyo político a los líderes municipales de los asentamientos judíos en Cisjordania, a los que animó en su labor y afirmó que el derecho de Israel a la tierra «no es debatible».
«Para mí, nuestro derecho a esta tierra no es un asunto de debate político, es un hecho básico del sionismo moderno», subrayó el mandatario hebreo, durante una entrevista con representantes de los asentamientos, según un comunicado difundido por su oficina de prensa.
El ex primer ministro y ex ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, reconoció que Israel estuvo a punto de atacar las instalaciones nucleares de Irán hasta en tres ocasiones durante los últimos cinco años.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) acusaron a Irán de estar detrás del ataque con cohetes contra el norte del país ocurrido desde Siria, informó una fuente militar.
«Cuatro cohetes de tipo Grad fueron dispararon desde territorio sirio contra Israel, dos impactaron en la Galilea (por primera vez desde la Guerra de Yom Kipur en 1973) y dos en el Golán. Sabemos quién está a cargo de lanzarlos: Said Izadi, el jefe de la división palestina de la fuerza iraní Al Quds», señaló la fuente a un grupo de periodistas.
El Tribunal Supremo israelí canceló temporalmente la detención administrativa del preso palestino Mohamed Aalán, en huelga de hambre desde hace 64 días, que corre riesgo de morir y amenazó con dejar de tomar agua y nutrientes si no se le ponía en libertad.
La Suprema Corte anunció su decisión después de que un escáner mostrase que Aalán sufrió daño cerebral y ordenó que, si se demuestra que el daño sufrido es irreversible, el preso deberá ser puesto en libertad y su detención revocada.
El primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, reiteró su objeción al acuerdo nuclear iraní y afirmó que Irán usará el dinero que obtenga tras el levantamiento de las sanciones para incrementar su participación en el terrorismo en la región.
Netanyahu hizo las declaraciones durante una visita a la Unidad de Comando Norte de las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI), donde él y el ministro de Defensa, Moshé Yaalón, recibieron un informe del jefe del Estado Mayor, Gadi Eizenkot, sobre los desafíos de seguridad que Israel enfrenta en sus fronteras con Siria y Líbano.
El preso palestino Mohammed Aalán, en huelga de hambre desde hace 60 días, recuperó el conocimiento y dio 24 horas al Gobierno israelí para que resuelva su caso, so pena de rechazar cualquier cuidado médico.
Al despertar, tras varios días de coma inducido, Aalán dijo a los médicos que continuará en huelga de hambre hasta lograr su liberación y que si no se halla una solución a su caso en 24 horas, pedirá que cese todo tratamiento.